Las ventajas de ser un marginado

SPOILERS

Tenía ganas de leer este libro porque la película me había gustado bastante y si bien venía sin demasiadas expectativas (porque eso es lo que trato de hacer cada vez que hay demasiado público encantado con una historia), es inevitable no darse cuenta del hype que genera, por lo que una parte de mí discretamente estaba hypeada.

Mi principal problema con este libro fue la manera en la que está escrito.
No que fuera una novela epistolar, no tuve problemas con eso. Lo que me molestó fue la manera de Chbosky de escribir, pasando todo por encima, sin profundizar en nada en absoluto. Sólo se habla del día a día de Charlie en el colegio, y a pesar de todas estas dudas y crisis que tiene por la etapa que está viviendo nada se toca en profundidad. Es como si el autor ni siquiera hubiese querido hablar de los dramas que tiene Charlie en su interior, sino llegar al punto en el que el prota conoce a Sam y Patrick.

Y vamos, que no es solo un par de temas que se tratan de manera muy superflua, son todos los temas que pudieran causar controversia: aborto, sexo (consentido o no), sexualidad, abuso a menores, drogas, violencia, alcohol, fiestas, muerte, etc.
Es como si Chbosky dijera: "Quiero hablar de todos estos temas que pueden poner a pensar a la gente sobre cosas de las cuales no quieren realmente pensar, pero sin que me critiquen por mis pensamientos sobre el tema.", y eso no me funciona para nada.

Y es que a ver *ya estoy hiperventilando*, Charlie vió a dos personas manteniendo relaciones sexuales en una edad en la que normalmente no debería, y en vez de tener algo de apoyo de parte de su familia, lo único que obtuvo fue un "Eres un pervertido" viniendo de la boca de su hermana.
Asumo que la idea era demostrar la poca atención que Charlie recibía de su familia, pero todo está demasiado superficial.

Traumas como el aborto no creo que se superen consiguiendo un nuevo novio y libros de auto-ayuda.
Ahora bien, entiendo que en la época en que fue escrito no se hablaba de ciertos temas como se habla en la actualidad, pero sigo manteniendo mi opinión sobre lo mal abordado que está todo.

Segundo, Charlie.
Estuve leyendo el libro desde el principio hasta el final con la idea de que nuestro prota es autista. No hay ningún tipo de declaración sobre este tema, pero al menos eso me pareció. Incluso antes de escribir esta reseña estuve investigando un poco sobre el tema y hay actitudes que se pueden relacionar con Charlie: falta de interacción social, risas o llantos sin motivo aparente, pueden ser muy pasivos, suelen frustrarse muy seguido y no saben como expresar sus sentimientos.
De hecho, muchas veces a Charlie lo describieron como una persona muy inteligente y con grandes talentos ocultos. Esto tendría mucho sentido, según mi experiencia teniendo un conocido con autismo, porque esta persona tiene conocimientos de muchas cosas para la edad que tiene.

Por otro lado, las características más comunes en gente autista no se presentaban en nuestro prota: movimientos repetitivos, falta de lenguaje o simplemente lenguaje nulo, aislamiento por voluntad propia, déficit de atención e impedimentos en el aprendizaje.
De todas maneras, puedo dejar pasar eso porque no todo el mundo tiene el mismo rango de autismo, por algo se lo conoce como "espectro".

Por lo tanto, no estaba segura de si estaba leyendo sobre una persona con TEA o sobre un chico bastante introvertido y excluido que no sabe cómo acercarse a la gente. El hecho de que por momentos se lo llamara "inteligente" y por otros "ingenuo" contribuyó bastante y me tuvo dando vueltas durante toda la lectura.

Algo que me molestó en especial fue la reacción de Charlie al enterarse de la masturbación. Entiendo perfectamente que una persona no encuentre el interés o la necesidad de practicar dicha actividad, pero ¿el rotundo desconocimiento? ¿Charlie no fue al colegio? Como suelen decir donde vivo, "puede faltarte calle", pero esto ya es ignorancia.

Me desconcertó mucho el no poder conectar con nuestro prota la gran parte de la novela, porque sí me identifiqué mucho con el Charlie de Logan Lerman y sólo quería abrazarlo y decirle que todo iba a estar bien, pero el Charlie del libro llegaba a molestarme por momentos.
De hecho me pasó exactamente lo mismo con todos los personajes, exceptuando a Bill y Mary Elizabeth, a quienes preferí en su versión literaria.
Sam empezó a gustarme a partir del 3/4 de la novela y Patrick era "meeeeeeh".

Creo que a Chbosky se le da mejor producir películas que escribir libros...oh well.

De todas formas tengo planeado releer este libro, porque a lo mejor no fue mi momento ideal para agarrarlo.

Mientras tanto, son tres estrellas.