La señal

La señal cuenta la historia de Mahingan Falls, un idílico pueblo al que se trasladan Tom y Olivia Spencer con su familia huyendo del bullicio de Nueva York. La Granja es una casa muy grande y silenciosa en forma de ele situada en un lugar apartado con viejas construcciónes aisladas. Mahingan Falls se presenta así como un pueblo tranquilo de Nueva Inglaterra a solo veinte kilómetros al sur de Salem, pero pronto comenzarán a ocurrir cosas extrañas.

VUELTA A LAS NOVELAS DE TERROR DE LOS AÑOS 80.

Hacía mucho que no leía un libro con las características propias de las novelas de los años ochenta. Recuerdo leer con pasión aquellas libros que me tenían enganchada a sus páginas durante días y lo mal que lo pasaba por las noches. El género de terror ha evolucionado hasta llegar a nuestros días un poco descafeinado. Antes, se caracterizaba por el requisito casi imprescindible de despertar en el lector sensaciones primitivas, de terror, preocupación, incomodidad e incluso asco. Eran novelas cargadas de emociones fuertes y no se avergonzaban de ello. Utilizaban argumentos con tramas de naturaleza maligna, asesinos o basadas en causas sobrenaturales o de corte fantástico. Pues bien, aquí tenéis una novela que cumple con los requisitos del género de terror de los años ochenta y si tenéis el gusto de leerla casi seguro tendréis la capacidad de reconocer algunas semejanza con otras novelas y las referencias a otros grandes autores del género de terror.

PERSONAJES, TRAMAS, RITMO Y TODO LO DEMÁS.

He sido capaz de empatizar con algunos personajes. Estoy segura que dentro del bosque de personajes que se presenta en esta novela, os llevaréis bien con alguno, no os preocupéis. Pues el autor ha creado este pueblo ficticio de cabo a rabo. Los personajes están trazados con tino y naturalidad. La trama está bien construida, mezcla de novela policíaca, terror y novela fantástica. Un ritmo sin acelerar a todo gas pero sin pisar el freno te va envolviendo y metiendo en ese pueblo extraño. Las escenas van sucediendo gradualmente. Así que con el paso de las páginas, la narración se crece, incorporando nuevos elementos que alimentan el misterio y la tensión. Si además, sois de los que os agrada ambientar vuestras lecturas con música el autor propone al principio del libro unos cuantos discos para entrar por la puerta grande a Mahingan Falls. del final, que os puedo decir. Maxime Chattam no cae en tópicos. No es una novela de finales felices. Sin héroes, ni villanos, solo víctimas.

SUPERSTICIONES, LEYENDAS LOCALES, SILUETAS INQUIETANTES, VOCES Y ... SEÑALES.

Por qué no decirlo, adoro el enclave en el que se sitúa Mahingan Falls. Plantado en un hondonada y retirado del resto del mundo. Un lugar con una herencia ancestral, recibida de los antiguos colonos que habitaron esas tierras hace mucho tiempo atrás y antes que ellos los indios que las fundaron. Así, por tanto, las supersticiones y las leyendas locales siguen aún muy vivas en Mahingan Falls. Gracias a esos vestigios antiguos, que actúan como catalizador, para la aparición de voces, siluetas y señales.

UNA NOVELA PARA LEER EN LA OSCURIDAD.

Yo leo despacio, como es habitual en mí, excepto cuando una novela me alcanza tan pronto como esta. Son casi setecientas páginas en las que he disfrutado del espectáculo narrativo de este autor. Aunque no he sentido miedo sí que he disfrutado de la opresión ambiental y de las descripciones intensas. Una novela para leer al cobijo de la oscuridad.

UNA NOVELA PARA LECTORES VALIENTES.

Es una novela bastante completa en la que me dejé llevar por el halo de misterio y amenaza de toda la novela. La atmósfera se vuelve agobiante nutrida de escenas macabras y rebosantes de sangre. Es una novela de emociones fuertes. Impactante y desaconsejada para corazones débiles. Pero si sois de los que se siente atraídos por las novelas de terror como un mosquito a un farol os animo a leerla.

Y os lo advierto. Es una lectura que te pone en situaciones muy duras. El autor no se corta ni un pelo en mostrarnos cada escena por muy truculenta y violenta que sea. Pero a pesar del alto contenido violento se puede creer en la historia. No es una historia descabellada y salida de contexto sino que, por el contrario, al final tiene una explicación.

Quizá, le sobren algunas páginas, pero en líneas generales no podría desechar nada. Eso sí, espero que hagan una miniserie de esas tan de moda hoy en día. Estaría genial.


Enlace: https://www.yoleonovela.com/..