Cuando hay que pedir amor todo está perdido. El amor no se pide, el amor se da.
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Cuando hay que pedir amor todo está perdido. El amor no se pide, el amor se da.
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Vivió el amor sin enterarse. Sin enterarse fue dejando que pasara sobre ella. Sin enterarse dejó caer la lluvia que la empapó y sin enterarse dejó que se secara lentamente. Sin advertir el proceso de secado. Primero mojada y luego húmeda. Y más tarde, irremediablemente seca. […]. Siempre se arrepiente Prudencia.
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Creyó que su vida era la de su marido y, cuando quiso darse cuenta, el marido tenía su vida y ella no tenía la propia. Todo lo hacía calculando si a él le gustaría y jamás se preguntó qué le gustaba a ella.
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Gregorio Samsa es un ...