La mitad de un libro la pone un escritor, la otra mitad la pones tú.
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La mitad de un libro la pone un escritor, la otra mitad la pones tú.
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—Y lo que nos marcó de verdad fue la guerra, no la Batalla del Ebro. (…) La batalla solo dejó heridas visibles. (…) Las trincheras, las ruinas, los cerros llenos de metralla, todas esas cosas que tanto les gustan a los turistas. (…) Pero las heridas de verdad son las otras, las que nadie ve, las que la gente lleva en secreto. Esas son las que lo explican todo, pero de esas nadie habla. Y quién sabe, a lo mejor está bien que así sea.
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Cuando van a por ti, van a por lo que más quieres.
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No me gusta ver películas basadas en novelas que ya he leído. Para qué, si yo ya me he hecho la película a mi medida.
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Un hombre sin miedo es capaz de todo.
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La mitad de un libro la pone el escritor, la otra mitad la pones tú.
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Hay circunstancias, donde la justicia y la venganza pueden ir de la mano
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A veces la justicia absoluta puede ser la más absoluta de las injusticias.
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Odiar a alguien es como beberte un vaso de veneno creyendo que así vas a matar a quien odias
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La realidad está llena de inverosimilitudes.
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10 negritos