Donde habitan los ángeles

Hay libros que son regalos para el alma, este es uno de ellos, llego a mis manos casi por casualidad y es de esos libros que cuando lo he terminado he pensado “pero, ¡cómo es posible que me haya tardado tanto en leerlo!”.

La vida misma, este libro nos maneja de una manera preciosa la situaciones más reales, más comunes y más generales de la vida, el amor, el abandono, el dolor, la pérdida, la confianza, la lealtad, la injusticia, en fin que se tocan todos los temas que cualquiera de nosotros haya podido vivir o hay vivido a lo largo de la vida, pero siempre con humor, siempre dejándonos esa lección de vida en donde cuando hay sabiduría en la guía no hay nada que no se pueda solventar.

El tío Tacho es un personaje realmente fascinante, genial, precioso, adorable y tremendamente chistoso, lo amé con todo mi corazón, ¡yo quiero a un Tío Tacho en mi vida!, a una tía Chabela que sin juzgar simplemente da amor y que con eso cura absolutamente todo.

De verdad este libro se ha quedado para siempre en mi corazón y definitivamente se ha ganado un lugar muy especial en mi estantería.

Originalmente es un libro escrito para niños o adolescentes, por supuesto que lo deberían de leer todos los adolescentes del mundo, pero también los que ya no lo somos porque definitivamente en sus páginas existe la magia de la realidad llevada a un punto de sabiduría que puede hacernos ver las cosas desde un punto de vista amable, tierno, divertido, pero sobre todo maravilloso.

Panchito es cada uno de nosotros, cada experiencia de vida, cada tristeza, cada alegría, cada suspiro de amor, la ingenuidad de un niño pequeño, la estupidez de la adolescencia, la oscuridad de cada lágrima de tristeza, los ojos del primer amor, la pérdida del amor, pero sobre todo la pérdida de los que amamos y aun así el Tío Tacho ha dejado para Panchito la mejor de sus lecciones, para él y para todos los que lo hemos conocido.

Hermoso, precioso, divino, maravilloso y me quedo corta en adjetivos, un libro que hay que leerse

Durante las vacaciones, Pancho y otros sobrinos de Tacho y Chabela llenan de alegría la casa familiar de San Miguel. Cuando esa temporada llega a su fin, todos los sobrinos vuelven a su hogar, pero Pancho no lo hace. La prolongación de la estancia y el consecuente abandono por parte de su madre, marcan la pauta que lo llevará a resolver sus problemas con valentía y a construirse un camino propio.

Claudia Celis nos lleva por una historia realista, contada de una forma tan sublime que deja nuestros sentimientos a flor de piel.
La novela es narrada en capítulos muy cortos que toman vida en sí mismos a manera de relatos independientes, pero mantienen la linealidad de la historia. Ésta cierta independencia de los capítulos da la pauta para reflexionar en distintos aspectos de la vida, enfocados principalmente en Pancho, el joven protagonista. La muerte, el amor, y los lazos familiares se convierten en el eje central de la historia y en esa necesidad que tenemos por explicarnos tan distintas realidades. El lenguaje sencillo y directo provocan una lectura fácil y aunque es propio de México mantiene un carácter universal.
Claudia nos atrapa en esta historia con una ingeniosa fusión de comedia y drama. Es sin duda una lectura íntima, capaz de despertar vivencias, de permitir que afloren ayeres o acariciar añoranzas.

Que maravilla de libro. Siempre me impresionan los libros que llegan al alma en poco más de 100 páginas.
Que tíos tan cariñosos.
Con este libro lloras, ríes, te hace pensar, te enseña muchísimas cosas, en resumidas, te dejan huella.
Sin duda es un libro que recordaré.

Este es el libro que abrió mis ojos, corazón y alma a la lectura. Me encanta todo de este libro tanto la portada, como la fuente de letra utilizada, la historia, tiene una buena redacción pero sobre todo es una historia con la que todos podemos identificarnos tanto en vivencias como con los mismos personajes y como reaccionan a los sucesos que dan giro a sus vidas.

Esta historia comienza con Panchito y sus primos, que se van de vacaciones a San Miguel de Allende, México. que es donde viven sus tíos, Tacho y Chabela, ahí pasan unas excelentes vacaciones llenas de las ocurrencias y travesuras de su tío Tacho.

Las vacaciones se acaban y todos los primos de Panchito vuelven a sus hogares, menos el.

Poco atrás el había perdido a su padre y al parecer su madre quería que se quedara un poco de tiempo mas con sus tíos para así tener un poco de tiempo para ella, ya que desde la muerte del padre ella dedicaba todo su tiempo al trabajo y a Panchito, olvidándose un poco de ella misma.

Su estancia en San Miguel se fue prolongado por mas tiempo y el sentía un gran vació por el distanciamiento de su madre y pensaba que todas las personas a las que el amaba lo abandonaban. Por otro lado, sus tíos tratan de llenar ese vació, así ellos se convierte en su familia.

Su tío Tacho es un hombre maravilloso y de carácter fuerte, y la Tía chabela es una mujer grandiosa y muy amorosa.

La vida de Panchito no es toda color de rosa, mientras va creciendo sufre mucho,una
caída tras otra y sus tíos le dan esa fuerza o motivación de seguir adelante y no rendirse.

Este libro simplemente me encanta, lo podría leer miles de veces y no me cansaría. Me enamore completamente.
Panchito es un niño con un gran corazón, y que a pesar de todo por lo que paso el siguió adelante, no dejado que nada lo derribara.

Es una historia corta, fácil de leer, pero que te deja muchas lecciones y enseñanzas, recomiendo mucho que lo lean, con el reirás, lloraras e incluso te enojaras.

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