La puerta roja

Me ha sorprendido mucho cómo escribe Claudia Catalán, de una manera cercana, tierna y sobre todo que consigue envolver al lector de una manera muy intensa. Ha conseguido que me meta de lleno en la historia, que imagine el pueblo, las calles, la fuente y esa puerta roja que tanta importancia tiene. Considero que es difícil conseguirlo, y quizá por eso me ha gustado tanto "La puerta roja". Además, la historia, aunque un poco lejana en el tiempo, la considero cercana, ya que, ¿quién no ha oído las historias de la infancia de nuestros abuelos? La guerra civil es nuestra historia, la de nuestros antepasados, y me alegro que Claudia Catalán haya elegido ese tema.

En "La puerta roja", la protagonista y narradora de la historia es Sacra, una niña alegre y un tanto pizpireta, con la que el lector irá creciendo y descubriendo las consecuencias de la guerra.

La inocencia de Sacra me ha desarmado. Para ella todos son vecinos, todos son amigos, y no entiende esa separación por culpa de la guerra. Las diferencias de bandos, no existen. Ha oído que a su familia les llaman "los rojos", y ella piensa que es por el color de la puerta de su casa. No entiende que es eso que todos llaman guerra, no entiende el vacío que hacen a algunos vecinos a raíz de ella, cuando de antes todos se ayudaban. Pero poco a poco, Sacra irá escuchando a escondidas, o con ayuda de otros vecinos y amigos, irá descubriendo lo que realmente ocurre.

El símbolo de la puerta roja de la casa, se podría decir que es la base de la novela. Tras la puerta roja, su familia estaba segura. La puerta roja es ese muro tras el que vivir, tras el que todas las mujeres de su familia se cuidan unas a otras y se hacen fuertes.

"La puerta roja" es una historia de mujeres valientes, mujeres que lucharon también en la guerra civil, de una manera diferente a estar en el frente. El miedo era palpable en las calles, a los soldados, a los bombardeos, al racionamiento de comida, a no tener con que mantener a los hijos, a no saber si tu marido, hermano o hijo va a regresar del frente. Mujeres, como las que componen la familia de Sacra, que lucharon cada una a su manera.

Claudia Catalán ha añadido un toque que se podría decir místico, onírico, a Sacra, que no me ha acabado de convencer del todo. Quizá lo haya ideado así para resaltar lo especial que es Sacra, o cómo va creciendo y siendo cada vez más consciente y partícipe de lo que ocurre. Quizá yo no lo haya comprendido del todo, pero creo que sin esa parte, sobre todo la del final, la historia hubiese funcionado mejor.

"La puerta roja" es una historia emotiva, que además como leemos al final, en las notas de la autora, tiene una base real, las vivencias de su abuela.

Sacra es una niña despierta, observadora y sensible, cuya infancia transcurre en plena Guerra Civil Española. Sacra y su madre se van a vivir a casa de su abuela Candelaria, ya que se han quedado solas cuando su padre se fue a luchar al frente.

"La puerta roja" es la particular visión de la pequeña Sacra sobre esos días de revueltas en su pueblo, donde familiares y amigos viven la angustia de la guerra y sus consecuencias.
Cuando alguien escribe como Claudia Catalán lo hace, puedo afirmar que lo que menos importa es la historia que cuenta. Pero si además, lo que cuenta es una preciosa historia como lo es "La puerta roja", ya me rindo a sus pies. Porque Claudia Catalán sabe cómo contar una historia y hacerlo con una gran sensibilidad, haciendo el relato muy emotivo.

Toda la historia gira alrededor de Sacra, una niña observadora y de una sensibilidad extraordinaria. Por la descripción que la autora hace de ella, yo la he imaginado de unos cinco años. A esa tierna edad, Sacra vive las cosas cotidianas de una forma especial. Obediente, callada, y siempre dispuesta a ayudar a su familia, sobre todo a su abuela, a la que adora sin condiciones.

Claudia Catalán nos sitúa en los primeros días de la guerra, cuando esta aún no se había materializado en el pueblo donde vivía Sacra y su familia. La niña echa de menos a su padre, que se fue al frente a luchar, pero ella no sabe qué significa esto. Ve cómo cambian cosas, comportamientos y miradas llenas de miedo en los adultos, y ella desde su prisma infantil no alcanza a saber plenamente qué está pasando, y lo peor, qué podría pasar. Miradas que callan secretos que una niña aún no puede entender y gestos que a sus ojos son inocuos, pero que los adultos saben usar para ocultar lo que no debe saberse.

Con esa misma mirada veremos a la pequeña Sacra en su pueblo, en un entorno rural donde aprenderá a amar la tierra y la naturaleza, cerca del río que llega a susurrarle cosas. Claudia Catalán nos hace un relato casi mágico de una época que dista de serlo, bajo la mirada inocente de una chiquilla.

"La puerta roja" es una historia de mujeres fuertes, en la que la abuela era ese faro al que seguir para no perderse, es una historia de mujeres luchadoras, mujeres de campo. Mujeres que tras la puerta roja de la casa de la abuela es donde se sienten fuertes, libres.

La narración de Claudia Catalán está dotada de gran belleza y sensibilidad. Su prosa es casi poética, es un gusto para los sentidos leer y casi ver el mundo bajo la mirada de una niña.

Y lo más especial para mí, ha sido saber que la autora ha escrito "La puerta roja" basándose en muchas de las historias que su abuela le ha ido contando a lo largo de su vida, vivencias propias de una época que a los de otra generación pueden parecernos muy lejana. Esas historias llenas de sabiduría que cualquiera de nuestras abuelas ha podido contarnos cuando éramos unos niños.

En resumen, "La puerta roja" es una historia escrita con gran sensibilidad, que aun basada en una época oscura de la historia de España, como es la Guerra Civil, está repleta de magia, con unos personajes femeninos llenos de fuerza y esperanza. Sin duda lo recomiendo.

La puerta roja, es el debut literario de Claudia Catalán donde nos sumergirá en la historia real de su abuela Sacra. Una novela a caballo entre la histórica y lo reflexivo, un libro donde los verdaderos protagonistas son los sentimientos.
Sacra, que se ha mudado a la casa de la abuela Candelaria ahora que se ha marchado al frente, se mueve entre las cacerolas al fuego y los campos de olivos. Fascinada por la naturaleza, la pequeña cuenta con cuatro amigos singulares: Pedro, el pastor, Carmen, con quien Sacra aprende a labrar y amar la tierra; la tía Isadora, la del cabello rojo y de la que todos saben, pero nadie dice que esconde un gran secreto innombrable; el viejo Don, cuya sabiduría fluye como el agua del río; y por último, un misterioso forastero que aparece en el pueblo una noche de tormenta.
Todos ellos acompañaran a Sacra a recorrer un camino de aprendizaje que podría salvarla cuando el cielo se vuelva fuego y la puerta Roja ya no pueda protegerla.
Lo importante era la puerta Roja…
Cuando la puerta Roja bate sus alas, dos mundos se conectan: un mundo en el que los hombres asedian la tierra y se libran guerras fratricidas, y ese otro mundo en el que la mirada de Sacra nos descubre qué hay al otro lado de las nubes de tormenta y estallido.

 Mi valoración personal:
Claudia Catalán nos sorprende con su primera novela, La puerta Roja una novela costumbrista que nos relata la guerra civil vista de la inocencia de una niña: Sacra.
Sacra tiene nueve años y ahora desde que su padre se ha ido al frente vive con su abuela, su madre su hermana pequeña y una tía. y es Sacra la que a través de su ojos nos irá enseñando como su familia y ella misma viven la contienda; los miedos, el no saber que va a pasar y como esas mujeres mientras sus maridos luchaban en el frente sacaban adelante como podían a la familia.
Con una narración más reflexiva que histórica, estamos ante un libro pausado, bastante lento para mi gusto y con demasiada descripción que, aunque son bonitas y poéticas siento que ralentiza la lectura.
La parte que más me ha gustado de la novela ha sido como a pesar de la dureza del momento Sacra sigue viendo la parte bonita de la vida, insistiendo en la luz a través de la oscuridad.
No se podría encuadrar en novela histórica ya que lo histórico solo es el contexto donde se haya enmarcado, es decir, solo el escenario donde trascurre la novela, yo lo considero más una novela de reflexión sobre recordar un pasado para no caer en los mismo errores.

En conclusión, una novela que he disfrutado pero que no ha sido el tipo de novela que yo esperaba en un principio, pero que sin duda recomiendo leer de forma pausada ya que es una novela para disfrutar por su bonita forma de narrar.

Cuando leí la sinopsis de la puerta roja de Claudia Catalán no sabía si iba a enfrentarme a una novela de fantasía o a narrativa. Y aunque, ahora que la he terminado, mi duda se haya resuelto, he de confesar que la novela sigue siendo un gran interrogante para mi.

oda la novela está rodeada de un halo de misterio (y algo de realismo mágico) que está muy unido a la visión de la realidad desde la mirada de una niña inocente. Ella no entiende bien lo que pasa y nos lo muestra con sus mismos interrogantes a lo que no nos da respuesta.


Sabemos que Sacra es especial, que ve y escucha cosas, que tiene una comunión especial con la naturaleza, que sus tías, su abuela, Pedro, Alain y Don hablan de ello a escondidas pero.... todo queda ahí, velado, sin dejarse ver. Y así, con una narrativa exquisita (todo hay que decirlo) y con ese continuo misterio sin resolver pasa la novela, pausadamente, sin sobresaltos.

Y cuando la novela termina, una se queda con una sensación un poco (muy) agridulce porque la novela está escrita con gran maestría, con un uso impecable de la lengua (realmente, en ese sentido me parece maravillosa) pero la sensación es de que no ha pasado nada, que le ha faltado fuerza, que la historia no ha llegado a calarme.

Cuando mi hijo me ha preguntado al verme terminar la novela : "¿Qué tal la novela, mamá? No te veo convencida", solo he podido decirle: "Rara".

Y esa es la única palabra que me viene a la cabeza cuando pienso en La puerta roja: RARA.

Rara, por su puesto, para mi, desde mi punto de vista y teniendo en cuenta mis gustos literarios. También, como os he dicho antes, está preciosamente escrita y los protagonista son todos fuertes y valientes, pero no puedo negar la sensación de que le ha faltado algo, como un refresco que le falta gas o una comida a la que le falta una pizca de sal.

No me veo capaz de deciros "No os leáis esta novela", pero tampoco la recomiendo encarecidamente. Lo siento, es de esos libros que dejo totalmente a vuestra elección y me lavo las manos totalmente. No me comprometo a recomendarla o no, porque aunque yo no la he disfrutado plenamente quizá vosotros sí encontréis esa pizquita de sal que a mi me ha faltado.

Ay! Qué lectura más especial, más tierna y qué bonita forma de escribir. .
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Sacra es una niña que vive en un pequeño pueblo de Castilla La Mancha. Ha estallado la guerra civil y su padre se ha marchado al frente. Junto a sus hermanos y su madre se traslada a vivir a casa de su abuela. Un hogar custiodado por la puerta roja, una protagonista clave en esta historia.
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A través de la mirada de Sacra, conoceremos sus dudas ante una situación que no entiende, veremos como las familias del pueblo pasan hambre, miedo y como crece la desconfianza entre ellos. Pero ante todos veremos como la sensibilidad de esta niña nos transporta a un lugar lleno de vida, donde la naturaleza y los sentimientos son lo realmente importante y seremos testigos de unas amistades muy peculiares, con la misma forma de ver la vida que nuestra protagonista.
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Una novela que está narrada de una forma preciosa, con maravillosas frases llenas de significado (tengo las páginas llenitas de post its ), con un realismo mágico muy especial y con una visión ingenua e inteligente sobre la realidad. Es una lectura tranquila, de disfrutar poco a poco, delicada y sutil.
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Los personajes están muy bien construidos. Llenos de matices, desprenden mucha luz .
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Es el primer libro de Claudia y no quiero perderme nada de lo que escriba. Además, os invito a que miréis su perfil de instagram. Si tueviese que definirlo en una palabra sería PAZ. Las imágenes, los textos, los poemas... Absolutamente maravilloso.
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Os recomiendo mucho esta historia si os gustan las novelas de realismo mágico donde priman los sentimientos, donde se saborean las páginas y donde se disfruta de la forma en que están contadas..