La poesía y la prosa poética debería leerse en pequeñas dosis para absorber cada palabra y cada emoción. Con este libro, ocurre de igual no. Es puro sentimiento, desnudándose la autora en cada página. Qué acertado es el título, ya que Itziar se arranca la ropa y también la piel para dejar a la vista lo más íntimo de la personas: su corazón. Encontramos fotografías e ilustraciones que complementan, no completan, los textos. Algunos escritos vienen con su traducción al catalán (o al castellano, dependiendo del idioma en que se escribiesen inicialmente). |