Con diferencia, lo peor que he leído en mi vida. La participación de escolares de primaria, hacendosos en la escritura, hubiera elevado el nivel de este disparate. Todo el relato, por llamarlo de manera amable, es un compendio infumable de clichés ya vistos en las pelis de A3, de las que emiten los fines de semana para echar la siesta. Los diálogos, tan absurdos como las conductas de sus personajes. Si llegas al final es por la mera curiosidad de ver si es capaz de remontar en algo la historia, pero no, el autor aún la disparata más. Terrible que esto se denomine "literatura" y que además sea un super ventas ya que eso implica que tiene su público. Es el reggaeton de las librerías. |