Me gustó muchísimo, esta trilogía me tiene encantada. Me ha fascinado todo este nuevo mundo que la autora ha creado dentro de su propio mundo, de monstruos de brillantes colores y avances en la ciencia mucho mayores que los de Los Siete Reinos. La narración es muy fluida, descriptiva sin resultar pesada. Sin embargo, al principio, como ya me pasó con el primer libro, siento que hay como una larga introducción en la que no sabes a dónde van o qué importancia tienen las cosas que están sucediendo. Pero lo que es desde la mitad del libro en adelante, se vuelve adictivo. Me tuvo leyendo a altísimas horas de la madrugada solo porque quería saber qué pasaría con todos estos personajes de los que me encariñé. Y hablando de personajes, la construcción de estos es impecable. Todos tienen un trasfondo, se han tratado con cuidado, la autora se da el tiempo necesario para desarrollarlos y para que les tomes cariño. Fuego, su evolución, su forma de ver el mundo y a las personas, me ha encantado. Pocas veces me gustan tanto los personajes femeninos como con esta autora. Además, la historia de amor lenta y bonita de Fuego y Brigan, y la relación de Brigan con Hanna me han sacado un montón de sonrisas. Otra cosa que me ha gustado mucho de la historia es cómo se representa el lazo que puede existir entre un humano y un animal: el amor y apego que los humanos podemos sentir por ellos, y la lealtad incondicional que los animales pueden sentir por sus dueños. En cuanto a la relación de este libro con el primero, no es mucha. Los personajes son todos nuevos, y la historia se desarrolla en lugar bastante alejado y desconocido del mundo que nos presentan en el primer libro, y para colmo unos treinta y pico de años antes. Sin embargo, sí que aparece un personaje del primer libro, obviamente muy joven, que en algunos momentos juro que me puso los pelos de punta. Personalmente, creo que la relación se verá más claramente en el siguiente libro, que ocurre unos ocho años después del primero, por más raro que suene. Será mi próxima lectura, así que ya veremos como se cierra ese asunto. + Leer más |
Una princesa exiliada, un dragón que cambia de forma, seis grullas encantadas, y una maldición indescriptible...
Se necesitará algo más que magia para encontrar el camino a casa.
Shiori'anma, la única princesa de Kiata, tiene un secreto. La magia prohibida corre por sus venas, y en la mañana de su ceremonia de compromiso Shiori pierde el control. al principio, su error parece un golpe de suerte, evitando la boda que nunca quiso, pero también atrae la atención de Raikama, su madrastra.
Raikama es una poderosa hechicera y destierra a la joven princesa, convirtiendo a sus hermanos en grullas, y advirtiendo a Shiori que no debe hablar de ello con nadie: por cada palabra que salga de sus labios, uno de sus hermanos morirá.
Sin voz y sola, Shiori emprende la búsqueda de sus hermanos y descubre una oscura conspiración para hacerse con el trono. Solo Shiori puede salvar el reino, pero antes debe confiar en un pájaro de papel, un dragón volátil, y en el mismo chico con el que tanto luchó por no casarse. Y debe abrazar la magia que le han enseñado a suprimir toda su vida, sin importar lo que cueste.
Un cuento de hadas adictivo y arrollador”
Kerri Maniscalco, autora de El reino de los malditos
“Deslumbrante”
Stephanie Garber, autora de Caraval
“Mágica”
Kristin Cashore, autora de Graceling