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Voy a iniciar por contarles que al principio tenía mis dudas con respecto a esta lectura, por una única razón y es que sabía de entrada que “Buenas intenciones” estaba basada en la novela de Jane Austen “Persuasión”. Y bueno, yo no he leído ese libro. No me malinterpreten en mi elección, pues yo estoy encantada con las obras de Austen, en especial “Orgullo y prejuicio” y claro, “Sensatez y sensibilidad”. Y como buena amante de la literatura clásica y romántica, tenía que leer esta obra a manos de Anna casanovas. Y vaya que lo disfrute. Buenas intenciones trata de dos Jóvenes que en su pasado vivieron un extraordinario romance, que por diversos hechos que se presentaron en su vida, no terminó muy bien cuando comenzó a tornarse serio. Y así es como conocemos a Anne, ahora convertida en una mujer decidida y que ha optado por luchar por sus ideales. Quien decidió dejar la carrera que había elegido para estudiar lo que más le apasiona, y por ello es que trabaja para solventar su pasantía en un crucero que la ayudara a cumplir sus sueños. Sin embargo, su situación familiar aún es complicada. Después de la muerte de su madre, ella junto con sus hermanas debieron enfrentar adversidades aún más complicadas y más con un padre egoísta al que no le importara conseguir las joyas que su madre les dejo antes de morir, para liquidar una deuda. Por ello es que a raíz de ese suceso, Anne y sus hermanas encontraran un interés en descubrir si es que realmente esas joyas son valiosas y si es que es verdad que el collar que posee Anne, perteneció nada más que a la mismísima Jane Austen. Por otro lado tenemos a Manel, quien ha logrado todo lo que deseo convertirse cuando joven, pues a su corta edad es creador de una aplicación a la que nombra Jane, una inteligencia artificial que crea a partir de que le rompieron el corazón. Y si, la ocasionante de eso fue Anne. Como el destino siempre se encarga de que las cosas tomen su curso. Manel debe regresar a Londres, ya que es muy probable que pueda descubrir el secreto de la relación de Jane Austen con Tom Lefroy. Y como Manel ha quedado bastante fascinado con la historia de estos dos, no desaprovechó la oportunidad de descubrirlo. Manel cuenta con que las probabilidad de re-encontrarse con su primer amor son casi inexistentes, por ello es que no se preocupa por eso. Sin embargo, sucede exactamente de la forma en que debe ser, sus caminos se cruzan. El encuentro de ambos resulta incómodo, pero los sentimientos que alguna vez sintieron, siguen allí. La cuestión ahora es si serán capaces de perdonar el pasado. Ya que ni Manel ni Anne son igual a sus “yo” del pasado. Ambos han cambiado para bien, han madurado y están dispuestos a tomar las riendas de su vida. Personalmente me ha encantado mucho su pasado de ellos dos, el cómo se conocieron, cómo se fueron desarrollando sus sentimientos que hasta el presente y aun con las dificultades que tuvieron que presentar siguen intactos. Es una historia maravillosa, escrita con palabras perfectas y emociones tan fuertes que te hacen enamorarte de este libro. Y a pesar de que no he leído la novela de Austen, pude disfrutarla sin ningún problema. Así que si te gusta el romance y los retellings, esta novela no la debes dejar escapar de tus manos. Enlace: https://heronstairsnews.blog.. |
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