Esta novela me atrapó desde el principio, la he leído en pocas horas. Me ha parecido magistral la manera de tratar el lenguaje de Jesús Carrasco, muy acorde con la trama y el impreciso lugar donde la sitúa. Hacía tiempo que no recurría tanto al diccionario leyendo una novela. He ampliado vocabulario y he refrescado palabras y conceptos olvidados. La historia que nos cuenta puede suceder en cualquier parte, un pueblo pequeño dejado de la mano de Dios, un paraje desolador y árido, con una sequía pertinaz; kilómetros y kilómetros de llanuras sin apenas sombra ni agua... Los protagonistas: un niño de edad indeterminada, un cabrero también con edad indeterminada pero con muchos años a sus espaldas, unas pocas cabras, un perro y un burro. El malo de la película, el alguacil del pueblo... Con estos personajes sin nombre, el autor Jesús Carrasco nos cuenta una historia muy dura de violencia, sufrimiento, precariedad y vileza... que te llega al corazón y te acerca al sufrimiento del niño y del pastor a manos de la brutalidad inherente al poder del más fuerte. Me ha parecido una novela excelente, para volver a leerla con más calma dentro de un tiempo para profundizar en la historia. 100% recomendable. Reseña escrita en febrero de 2021 |