Me gustó mucho este estilo de la autora, donde le da voz a cada una de las protagonistas, cada una con su propia problemática y sus deseos. A pesar de lo complicado de los temas, sabe cómo presentarlos para que no parezca un juicio sino una muestra para comprender la sociedad en la que han vivido estas mujeres africanas y cómo buscan mejores condiciones de vida. Mi personaje favorito es Aminata, la mamá. Ella va abriendo los ojos a su nueva realidad y se da cuenta de que quiere una vida diferente a la que ha conocido en su familia. Se siente orgullosa de su hija y a través de ella va viendo sus posibilidades de vida. Muy recomendable para acercarse al tema de la "purificación" y de la migración, del matriarcado y de la adaptación. |