La autora de Los líderes del mañana y yo intercambiamos nuestros libros y fue una magnífica idea, ya que lo terminé en una sentada (aunque realmente fue tumbada, porque lo leí en la cama). Lo bueno si breve dos veces bueno y esta novela se lee muy fácil porque toca puntos que como padre de familia me llegan bien profundo: la educación, la aceptación social, la competitividad y por supuesto, el amor. Felicito a Carmen por haber creado esta distopía tan original, que recomiendo a jóvenes y no tan jóvenes. |