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Polly y Pulga son dos hermanos que viven en una enorme y lúgubre casa de la que sólo conocen la guardería en la que viven y el colegio. Nunca han visto a sus padres, sólo interactúan con la Tata que les cuida y les alimenta bajo la premisa que llegado el momento irán sus padres a buscarlos, y a su vez salvarlos de aquello que habita la casa además de ellos mismos. Pero algo pasa, y todo su mundo se desmorona obligándoles a ser ellos los que deban enfrentarse al mundo exterior y buscar a sus padres. Bajo esta premisa me introduje por primera vez en el bizarro, sin tener ni idea de lo que podia encontrarme, solo impulsada por mi vena curiosa por probar nuevas lecturas. Y vaya lectura!!! Por la puerta grande me he metido yo en este género. Estamos ante una adictiva obra que va siguiendo los pasos de nuestros protagonistas, de manera tanto terrorífica como tierna (ojo, terrorífica en cuanto a la ambientación, pero en ningún momento pasé miedo la verdad). Se sirve del miedo a lo desconocido, de los traumas infantiles ocasionados por esa ausencia paterna, que sirven para generar ciertos sentimientos al lector, ya sean de rechazo o no que llegan a impactar al lector. Podríamos decir que estamos ante un mundo distopico del que se sirve el autor para enviarnos mensajes, todo tiene una razón de ser, cualquier elemento de la casa, de nuestros protagonistas y su alrededor, nada está allí por casualidad, ni siquiera los propios personajes que aparecen en la historia. En cuanto a la ambientación es sublime. El autor nos mete en un ambiente opresivo, oscuro y peligroso, que no nos abandona en toda la lectura, mientras acompañamos a nuestros protagonistas en esta expansión de su mundo, haciendo, como ya he dicho antes, que no podamos dejar de leer. Por otro lado, y a pesar del mundo creado por el autor, la atmósfera y la creación de los propios personajes (de los cuales no voy a contar nada para evitar cualquier tipo de destripe), la parte tierna viene dada por los propios niños y esa incansable búsqueda de sus progenitores, lo que les lleva a luchar ferozmente por conseguir su objetivo. Los personajes, y por ende los lectores, no tienen ni un minuto de respiro hasta el final de la novela. Los protagonistas caminan en la fina línea de la obediencia o rebeldía hacia unos padres ausentes pero cuya presencia aparenta llenar cada una de las páginas de esta historia. Estamos ante una historia repleta de elementos simbólicos que llevan a ideas y reflexiones muy inteligentes que culminan en un absoluto y maravilloso clímax final, y que recomiendo no solo a los amantes de lo raro, o lo terrorífico sino a cualquier persona que no se deje llevar por los prejuicios en lo que a literatura se refiere, y que quiera adentrarse en un mundo donde los personajes, como todo el mundo, andan a ciegas en un mundo confuso y hostil mientras buscan algo de cariño. Y vosotros, os atrevéis a adentraros en la casa y acompañar a Polly y Pulga en esa búsqueda de sus progenitores y crecimiento personal y a la ayudarles a enfrentarse a sus propios miedos y a aquello que se esconde en las sombras de la casa?? |
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