Me ha tenido enganchada de principio a fin. Es una historia de amor LGTBI preciosa y conmovedora. El marco desgarrador por la muerte del hermano que envuelve y da forma a la trama amorosa es absolutamente brillante y hace que estés gran parte de la novela con lágrimas en los ojos. Y el tema principal: el amor, la comprensión y la aceptación del mismo, entre dos chicos-amigos educados de una forma tan diferente y opuesta como una madre hippie y unos padres conservadores del partido republicano americano es un acierto total respetando en todo momento el enfoque y tratado con suma naturalidad y delicadeza el tema. Rompe tan necesariamente con muchos prejuicios en torno a este tema y adoras a los protagonistas desde el primer segundo. Es una novela maravillosa, escrita con un amor increíble y que te hace sentir al máximo. Lo mejor que leí este año |