Cuarta entrega de la serie Montalbano, y una de las mejores de esta magnífica saga policíaca “a la siciliana”. La voz del violín (1997), de Andrea Camilleri, nos muestra ya el universo Montalbano perfectamente consolidado. y nos cuenta una historia atractiva y llena de ritmo. En esta ocasión todo se inicia con el hallazgo casual del cadáver de una mujer joven por parte del propio comisario. Michela Licalzi, una artista que llevaba una vida solitaria apartada del mundo, yace tendida sobre su cama. Todo indica que se trata de un asesinato. El cerebro de Montalbano, que como ya sabemos funciona mejor cuando el estómago está lleno de deliciosos manjares de la Trattoria San Calogero, empieza a profundizar en los motivos del asesinato y los posibles sospechosos, que no son pocos. Sin desentrañar la trama, podemos adelantar que en esta ocasión Montalbano se las va a tener que ver con la burocracia y las trabas jerárquicas impuestas dentro de la propia policía. No queda más remedio que, una vez más, saltarse las reglas. (Seguir leyendo la reseña en el enlace): Enlace: https://humildelector.com/20.. |