La última neandertal

En “La última neandertal”, Claire Cameron nos lleva de la mano a la prehistoria, justo hace 40.000 años, cuando el homo sapiens se cruzó en el camino con los neandertales.
La novela se divide en dos líneas temporales, la actual, donde Rose descubre los restos de una neandertal y un homo sapiens en una postura claramente amorosa. Esto abriría una puerta a nuevas líneas en la rama de la paleontología, en la que hasta ahora, las investigaciones apuntaban a que aunque los hombres modernos y los neandertales se cruzaron, entre ellos no había habido vínculos afectivos.
Por otra parte, nos trasladamos hace 40.000 años y conocemos a Chica. Una neandertal en etapa fértil que vivía con Gran Madre, Chico, Canijo y Lisiado, toda su familia. He de reconocer que esta parte es la que más he disfrutado.
Se ve claramente que la autora se ha documentado a fondo sobre esta etapa de la prehistoria y ha novelado esta historia, mezclando la ficción con la realidad para dar forma a Chica, nuestra gran protagonista.
Así pues, aquí se desmontan muchos mitos sobre el hombre neandertal rudo de andares simiescos, sin capacidad para razonar. A través de Chica y su familia descubrimos que los neandertales no eran tan distintos a nosotros, vivían en familia, dormían juntos para darse calor, fabricaban sus propias lanzas, cazaban en equipo, guardaban sus objetos de valor, se proveían de los alimentos necesarios para pasar el invierno, fabricaban sus propios abalorios e incluso tenían mascota, en este caso un gran gato montés. Sabemos que humanos y neandertales llegaron a tener relaciones sexuales, ya que hoy en día llevamos ADN neandertal en nuestras venas. Me ha gustado mucho el detalle de la autora en señalar que los neandertales eran de piel clara, europeos mientras el homo sapiens que llegó a sus tierras tenía la piel oscura.Todo este tema es apasionante.
La historia de Rose y de Chica se ven enlazadas por la maternidad. En la época actual, Rose se ve en la encrucijada que muchas mujeres nos vemos hoy en día cuando vamos a ser madres, conciliar trabajo e hijos. Y Rose tiene un trabajo que la absorbe a tiempo completo. Por su parte, Chica no lo tenía más fácil, dado su entorno prehistórico, evidentemente.
En general, “La última neandertal” me ha parecido una buena historia, muy bien documentada donde curiosamente he logrado empatizar más con Chica, la neandertal que con Rose. Si tienes curiosidad por saber sobre la época prehistórica y a la vez disfrutar de una buena historia, esta novela te va a encantar.

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