Oli se va a Cádiz una semana con sus amigas. Una chica de 24 años que no tiene familia pero que nunca le falta una sonrisa, es simpática y muy buena amiga. Está con Diego, porque se siente que está en deuda con su familia por todo lo que le han ofrecido a ella cuando perdió a su familia a los 15 años. En Cádiz conoce a Alberto, un actor de 30 años que tiene una vida difícil desde su infancia. Es cariñoso, paciente y adorable pero demasiado autodestructivo por culpa de la familia que tiene. Cuando se conocen, entre ellos hay demasiada química y mientras se van conociendo, ven que entre ellos hay más que química y que les une algo muy fuerte: el amor y como no, el mar. Oli es una salvación, un refugio para Alberto y Alberto es lo que necesita Oli para salir adelante y saber que tiene que buscar su propia felicidad. Las amigas de Oli, son amigas que ojalá tuviera todo el mundo. Sara y Rocío están ahí en cualquier momento, dándole buenos consejos y ayudándola. Una historia llena de amor, de amistad, de madurez, de miedos, de saber que querer, de salir adelante, de luchar contra tus propios fantasmas y avanzar. Es una historia divertida, con chispa, real, sencilla y que nada más empezarlo, te enamoras de los protagonistas, sobre todo de Alberto. Está narrada por ambos protagonistas y conoces a la perfección como se sienten y vas avanzando con ellos. |