El universo de Zoe

Pura fantasia. Es cierto que no estás de acuerdo con algunos personajes, con algunos actos, que no apoyas ciertas decisiones, pero a pesar de ello conectas con la historia, conectas con ellos y te sumerges en sus páginas disfrutando de todo el proceso.
Personajes muy autenticos, y increíbles, porque Adrián enamora desde el primer minuto hasta el último, y se le podrá tachar de muchas cosas, no todos estarán de acuerdo con su persona, pero yo creo que es un hombre realmente maravilloso y que a mí me ha conquistado.
Zoe quizás no tanto porque no comparto sus actitudes, pero de la misma manera es alguien real y que se muestra tan natural y cercana, que al final te llega.
Y ya sin mencionar el poder seguir teniendo pedacitos de la gente que ya nos conquistó en su día, que eso siempre son pluses.
Y no voy a decir nada de Triana, porque señores, deben conocerla.

Como tengo mala memoria, no recuerdo con detalle el final de «El camino de Gala» (lo leí en 2019), y por eso lo que sucede en esta historia me ha sorprendido tanto. Zoe no tiene pelos en la lengua, es todo fuerza y creatividad; Adrián es lo más paciente y buenazo que hay. Los dos me han gustado mucho y su relación, aún más; es un «friends to lovers» muy bonito que se cuece a fuego lento. Eso sí, mi debilidad ha sido Triana. También he disfrutado de las escenas con Marc, Gala y compañía; el grupo que se forma en el Camino de Santiago es genial.


Una historia que engancha, con un amor calmado y maduro que yo he disfrutado mucho.