odxs leimos en algún momento de nuestra vida de escuela secundaria, con resignada obligación, el Martín Fierro. Pero, así y todo, nunca supimos cómo se llama su mujer, ni qué fue de ella, cuando él se va. Por suerte, y con una mirada "de china", Gabriela Cabezón Cámara nos pone en noticia, y le da un nombre que la equipara a ese Gaucho Fierro. Y, nada de sufrientes amores romáticos: la China Iron descubre que no es solo una mujer abandonada, sino que descubre su vida al irse al desierto con la inglesa. Una novela de aventuras de dos mujeres sueltas en la pampa, aventuras contadas con ironía e inocencia. Y con el amor que nace entre ellas. Mucho más que muy recomendable. |