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Estéticamente, me enamoré de este libro nada más verlo, pero cuando lo he tenido entre las manos la realidad ha superado con creces las expectativas. Tanto la ilustracion de la portada como las que se pueden encontrar dentro del libro están dotadas de una belleza y una sutileza extraordinarias, el tacto de la edición, el de las páginas...he tratado a este libro con la delicadeza con la que se trata algo valioso y frágil, con el cuidado que se otorga a eso que consideras especial y extraordinario. He leído cada poema escondida en un rincón de la casa, bajo la manta y ajena al ruido, los he disfrutado como pequeños tesoros, como secretos susurrados al oído. Sin prisa, en silencio, a solas. Dividido en tres capítulos titulados "Sé fuerte", "Sé tuya" y "Sé sabía", este poemario nos conducirá a través de un viaje desde lo doloroso del desamor y el estallido de la tormenta, recomponiendo poco a poco los restos que esta dejo a su paso, queriéndonos despacito, aceptandonos paso a paso, para llegar a la calma que otorga la sabiduría y el conocimiento, permitiendonos disfrutar del descanso de la guerrera habiendo sanado las heridas del corazón y del alma, saliendo fortalecidas, renovadas, bellas. Un regalo para los sentidos que me ha emocionado y me ha tocado el corazón. Gracias Rafael Cabaliere por este derroche de gusto y sensibilidad y por cada uno de estos pedacitos de corazón con forma de poemas. |
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