La velocidad de la noche

La Velocidad de la Noche fue una de las novedades de Puck que más me llamó la atención del mes de octubre. Nada más leer la sinopsis me recordó un poco a la serie The Flash, solo que esta vez la habilidad de correr tan rápido no viene dada por poderes adquiridos a través de la explosión del acelerador de partículas de los Laboratorios Star, sino a través de la ingesta de una droga que te otorga esa habilidad durante escasos 9 minutos. Con todo, era una trama demasiado atractiva como para dejarla escapar y el resultado ha sido bastante bueno.

Alana, una runner que está a punto de cumplir los dieciocho años, forma parte de la URT (Unidad de Respuesta Tetra), una unidad del gobierno dedicada a perseguir a los llamados bólidos, jóvenes delincuentes que utilizan Tetra para cometer crímenes. Como esta droga solo es asimilable por el organismo humano hasta los dieciocho años, la URT está formada por jóvenes que se inyectan voluntariamente la droga, de manera controlada, para ponerle al nivel de los bólidos y atraparlos y encerrarlos antes de que puedan escapar y seguir cometiendo sus actos delictivos. Es por ello que Alana, aún a poco de cumplir dieciocho años y arriesgarse a morir si toma Tetra después de esa edad, acepta infiltrarse en las calles para dar con el traficante ilegal de la droga y poner fin a su uso y consumo entre los jóvenes. ¿Qué ocurrirá?

Alana es un personaje con el que se congenia nada más empezar la historia, sobre todo por la narración en primera persona. Se convirtió en runner con el único fin de encontrar al bólido que dejó a su hermano en silla de ruedas tras un cruce fortuito por la calle. Quiere atraparlo y ponerlo entre rejas antes de que pueda hacer daño a otro transeúnte más. Es una joven inteligente y decidida, muy arraigada al sentido de la justicia y la familia, la cual trata de proteger a toca costa. Pero también es un personaje que madura sobre la marcha y descubre que no todo es blanco o negro y se verá obligada a tomar decisiones bastante duras, plantéandose dónde se encuentra el límite de lo ético y moral y qué es lo correcto dentro de todo el mundo de los bólidos, los runners y la tetra.
Hay otros personajes importantes como Ethan, miembro de la banda criminal en la que se infiltra Alana, y por el que pronto empezará a sentirse atraída; Rapunzel, también miembro de la banda criminal, una chica muy divertida y risueña; y Tucker, entre otros, compañero y controlador de Alana dentro de la URT, y un chico que tiene algún que otro secreto que nos sorprenderá hacia el final de la historia. Me gustó mucho.

En la trama nos encontramos con un triángulo amoroso que, bueno, no ha sido santo de mi devoción, pero te permite desconectar del apartado de acción y darle otro toque a la historia que sí podría agradar a aquellos que busquen algo de romance dentro del todo el caos de las infiltraciones y las persecuciones callejeras a máxima velocidad.

Y la máxima velocidad me lleva a hablaros de los escenarios de acción y la pluma del actor, que permite que nos situemos con suma facilidad dentro de la historia, con escenarios nítidos y ese recuerdo y similitud a The Flash. Chris Howard ha realizado un buen trabajo narrativo. Además, acción aparte, también nos encontramos con reflexiones y temas morales en torno al consumo ilegal de drogas entre adolescentes y al control y a las intenciones ocultas de un gobierno que trata de parar el contrabando a través del uso de jóvenes que consienten consumir dosis controladas de Tetra para perseguir y capturar a esos bólidos. Y eso, unido a varios giros argumentales finales, hacen de la Velocidad de la Noche una lectura muy entretenida y original.

En resumen, 'Velocidad de la Noche' es una novela con un argumento muy original y visual marcado por la velocidad, las infiltraciones y la acción. Pero, acción aparte, también nos encontramos con reflexiones y temas morales en torno al consumo ilegal de drogas entre adolescentes y al control y a las intenciones ocultas de un gobierno de doble rasero. Y eso, unido a varios giros argumentales finales, hacen de la Velocidad de la Noche una lectura muy entretenida y original.

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Giros continuos, acción que no para, vamos a sufrir con nuestra chica sin saber si es parte de un plan o simplemente una víctima, en el momento en que todo se tuerza para ella, y es ahí donde me ha dejado boquiabierta esta maravilla. Lo he disfrutado tanto que me duró un día, si es que cuando hay argumentos que se sostienen, lo único que te queda es vivir la experiencia del mismo modo que nuestra protagonista en LA VELOCIDAD DE LA NOCHE. Si
a esto le añadimos unos secundarios que te muestran que no todo es lo que parece, que a veces incluso los villanos tienen conciencia y corazón, es que tenemos una obra redonda que no deja ningún cabo suelto, y eso, oh dioses lo agradezco un montón.

Chis Howard ha sabido sorprenderme, tenerme anclada al asiento y ansiosa por desvelar todo lo que tenía oculto, me ha encantado ese final justo, mostrando que no todo puede ser de ensueño, pero que los justos también obtienen algo bueno. Solo puedo decir que estoy ansiando volver a leer a este autor. ¡Feliz lectura!
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'La velocidad de la noche' ha sido toda una sorpresa para mí. de primeras ya me llamó bastante la atención, parecía una historia llena de acción, y me he encontrado con un libro trepidante que engancha desde el inicio, pues desde las primeras páginas ya podemos conocer a Alana en plena acción, donde aprovecharán para contarnos de manera rápida cómo funciona la Tetra, qué es y cómo la utilizan.

Nuestra protagonista, Alana, es una chica de diecisiete años que trabaja en la Unidad de Respuesta Tetra (URT) dando a caza a criminales que también utilizan esta droga pero para cometer atracos. Lo que otorga la Tetra es la habilidad para correr a una velocidad fuera de lo normal durante nueve minutos, tiempo que aprovechan los malos (aquí conocidos como bólidos) para hiur de los bancos, y los buenos (runners), para atraparles.

Pero Alana no está en esta unidad por su ayuda a la sociedad, si no para vengarse del bólido que dejó en silla de ruedas a su hermano pequeño. ¿El problema? Tan solo le quedan unos meses para cumplir los dieciocho, y si no captura antes al culpable, deberá dejar de tomar esta droga para siempre si no quiere ser presa de "las agujas" y morir.

Es aquí cuando empieza a desarrollarse toda la trama de esta adictiva historia. Debido a varios malentendidos, Alana se ve forzada a infiltrarse en una organización de bólidos, donde quizás las cosas no son como ella siempre había pensado. Conoceremos entonces varios personajes nuevos que me han gustado mucho, especialmente Ethan, que diría que es el que más protagonismo tiene. Me ha gustado mucho el rollito que hay entre los integrantes de ese grupo, la verdad.

Tengo que decir también que, hacia el final del libro se descubre algo que me pilló por sorpresa, cosa que siempre se agradece. Lo cierto es que me ha parecido una historia bastante original, algo diferente a lo que siempre acostumbro a leer, y eso para mí es un punto a favor. Tengo que hacer mención también a la forma que tiene el autor de escribir, la cual no se hace pesada en absoluto, si no muy fluída y sabe meterte de lleno en la historia.

Quería comentar, por último (porque creo que con la información que os he dado es suficiente, y que es mejor leerlo para disfrutarlo al cien por cien), que la portada me parece preciosa, pero más acorde aún me parece la original, pues ya que hablamos de habilidades relacionadas con la velocidad, esas líneas simulando un recorrido realizado de manera muy rapida, le quedan que ni pintado.

En conclusión, 'La velocidad de la noche' es una historia adictiva, fresca y original, llena de compañerismo y amor, pero también de mucho dolor, donde arriesgarlo todo por las personas que quieres es un punto clave. Si os apetece una buena historia, os la recomiendo totalmente.
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Me ha asombrado mucho el desarrollo de la historia.
Y no es para menos ya que los protagonistas de esta historia son prácticamente niños, utilizando un tema bastante controversial como lo es el uso de las drogas.

Esto nos lleva a una organización que se dedica a atrapar a estos "adolescentes delincuentes" menores de 18 años a los que conocen como "bólidos" que usan una droga conocida como "Tetra o tempo" (y un sinfín de nombres con el que bautizan a aquella sustancia) para cometer actos delictivos. Lo increíble de todo esto, es que estos chicos son atrapados de igual manera por jóvenes que deben tomar esta droga para volverse más rápidos y así poder cazarlos.

Porque bien dicen… “Lo que no te mata, te hace más rápido”

Así es como conocemos a Alana, una de las Runners más rápidas de la URT conocida como la "pequeña liebre", una chica menuda que no parece tener nada especial, sin embargo, aunque
no parece tan fuerte... es la más veloz y ellos lo saben.

Junto con su instructor "Trucker", Alana se enfrenta a uno de los bólidos más peligrosos conocido como GoPro. Quien es una delincuente conocida por sus vídeos en YouTube y a quien Alana, en su persecución tiene la des fortuna de ver cómo comete suicido al lanzase por la ventana cuando el efecto de la droga ya se les ha pasado.

Y ahí es donde todo se desencadena...

Alana es considerada una persona descontrolada a causa de la droga y por ello es que es acusada por la muerte de aquel bólido y por ende es destituida de su cargo.

La chica está a punto de cumplir los dieciocho años, por lo que pronto tendrá que dejar de tomar el “tetra” y ahora, debido a ese confinamiento, es probable que no pueda completar la venganza que la orillo en primer lugar a ingresar a la UTR.

Justo cuando todo parece no tener escapatoria, es llamada para convertirse en un espía clandestino y tener la oportunidad de tener su venganza y por ello tendrá que vivir como un bólido, y así mientras vive con ellos poder descubrir quién es el trafica con esa droga en las calles.

Sin embargo, todo ello la alejara de su familia y será vista ante el mundo como una traidora.

Pero tal vez no todo sea lo que parece, y cuando Lana ingrese a aquel mundo que tanto odia, la venda que lleva en los ojos se caiga y pueda conocer las verdaderas intenciones de todos.

La velocidad de la noche, es una historia excelente, con una narración fluida que te hace disfrutar cada escena como si la estuvieras corriendo por si sola… algo así como las drogas jajaj

Totalmente recomendable.

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En estos últimos meses me he aficionado a leer los libros que está publicando Puck, pero ¿quién se resiste a ellos con la buena pinta que tienen? Y es que sí, reconozcamos que están que se salen con sus últimas publicaciones y las que están por venir. Habrá a quien no les guste, obviamente no todos tenemos los mismos gustos, pero a mí me están gustando mucho y aún me falta comprar un par de libros que han sacado en estos meses.

La velocidad de la noche del autor Chris Howard era uno de esos libros que me llamaron la atención en cuanto leí la sinopsis; una droga que da una fuerza sobrehumana y que además no puedes tomar a partir de que cumples los 18. ¿No es una premisa interesante? ¿Por qué no se puede tomar a partir de esa edad? Pues todas esas dudas son resueltas en el libro.

Chris Howard ha creado un libro que atrapa desde la primera página, con un ritmo que no decae en ningún momento y con una protagonista con la que enseguida empatizas. Alana es una runner que pertenece a la URT; Unidad de Respuesta Tetra, que es el grupo encargado de detener a los bólidos, jóvenes que toman tetra para delinquir, sobre todo para robar bancos.

Pero Alana no está en la unidad para acabar con la delincuencia sino para vengar a su hermano, el cual quedó en una silla de ruedas por culpa de un accidente provocado por un bólido. Y está dispuesta a lo que sea por cumplirlo, incluso infiltrarse en la organización a la que más odia, la de los bólidos.

¿Será capaz de cumplir su promesa? ¿Y si las cosas no son lo que parecen en realidad?

Como os comentaba antes, nos encontramos un libro bastante diferente a lo habitual en algunos aspectos de la trama. En esta ocasión los personajes tienen poderes pero es a causa de las drogas. Algo que me ha parecido más que acertado en este libro es que el autor ha querido mostrarnos el lado malo de las drogas y lo que estas pueden llegar a hacer a las personas, algo que sucede en la vida real, ya que cuando se va bajo los efectos de las drogas no se "controla" aunque ellos piensen que sí.

Alana es una chica que me ha gustado mucho, ya dije que enseguida se empatiza con ella y quizás ayuda el hecho de que está narrado en primera persona por ella, por lo que en todo momento podemos "ver" qué siente o qué piensa. Se nota el cariño que le tiene a su hermano y es comprensible que quiera vengarse por todo lo que le sucedió.

Hay otros personajes como Tucker, su supervisor dentro de la URT o incluso Ethan, uno de los miembros de los bólidos. Los dos son importantes para Alana y los dos sorprenderán con lo que representan en la trama. Quizás el triángulo amoroso pueda no ser del gusto de muchos, pero a mí no me ha molestado para nada.

Obviamente hay muchísima acción en la novela y a pesar de que el autor nos describe la droga, sus efectos y hay bastante información, no es un libro que se haga pesado o lento quizás debido a la justa balanza entre las descripciones y los diálogos.

En definitiva, La velocidad de la noche es un libro ágil en el que no decae la acción, con una protagonista valiente y decidida y que hará las delicias de todos los aficionados a este tipo de tramas o incluso a los seguidores de la serie Flash.
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