La estirpe de Lilith

Mi reseña de Amanecer.

¿Cómo sería despertar y descubrir que eres una de las pocas personas que quedan con vida? ¿Cómo sería enterarte de que tu gente, con sus guerras, casi consigue aniquilar con éxito a toda la raza humana? ¿Qué estarías dispuesta a sacrificar por la posibilidad de volver a poblar la Tierra? ¿Qué ocurriría si los que te ofrecen esa oportunidad no son de tu misma especie? Hoy quiero recomendarles Amanecer, de Octavia E. Butler. La primera de las novelas que conforman la famosa Trilogía Xenogénesis, recuperada ahora por el sello Nova en una maravillosa edición en tapa dura en un solo volumen: La estirpe de Lilith.

«En su intento por destruirse a sí misma, la humanidad había convertido el mundo en algo inhabitable. Ella había estado segura de que iba a morir, a pesar de que había sobrevivido a los bombardeos sin sufrir siquiera un rasguño».

Esta es la historia de Lilith Iyapo, una mujer afroamericana de veintiséis años que despierta de la reanimación suspendida en la que se encontraba sin saber dónde está. Ella es de los pocos seres humanos que pudieron ser salvados de la destrucción de la Tierra y su desastre nuclear por una misteriosa raza alienígena llamada oankali. Cuando recupera la conciencia ya no se encuentra en su antiguo hogar, sino en una inmensa nave espacial que orbita cerca del tercer planeta.

¿Qué quieren los oankali de los humanos? ¿Por qué decidieron salvar a algunos? ¿Por qué su intervención llegó tan tarde? ¿No podían impedir que las bombas nucleares dejasen en primer lugar el planeta inhabitable? Estas y muchas preguntas más serán las que plantee nuestra protagonista en un primer momento. Pero luego llegarán otras aún más importantes: ¿Por qué los alienígenas muestran interés en Lilith? ¿Cuánto tiempo lleva dormida? ¿Qué tareas le quieren asignar? ¿Por qué debe ser precisamente ella la que deba guiar a los otros humanos en su primera interacción con los extraños oankali? ¿Qué parte de su propia humanidad está dispuesta a sacrificar por la posibilidad de volver a la Tierra? ¿Cuál es el precio de esa ayuda?

«Cuando hayan acabado con nosotros ya no quedará ningún ser humano de verdad. Ni aquí ni en la Tierra. Acabarán lo que las bombas empezaron».

Una de las partes más asombrosas del libro es ir descubriendo a los oankali, seres alienígenas que tienen una apariencia tan diferente a nosotros que lo primero que causan es verdadero pavor. Un rechazo instintivo y tan difícil de superar que hasta que un humano no es capaz de interactuar con un extraterrestre no se considera que está preparado para volver a la Tierra. Porque si los supervivientes desean regresar a su hogar, deben aceptar que los oankali los acompañarán. Esos seres que han recorrido la galaxia y pueden incluso modificar el ADN de todos los seres vivos con los que interactúan, quieren no solo devolverles su planeta después de haberlo salvado y modificado para acelerar su recuperación, sino también ir con ellos y cambiarlos mientras a su vez se transforman así mismos.

Una de las muchas peculiaridades de esos extraterrestres es que entre ellos no existen solo dos sexos, sino tres: las hembras, los machos y un tercero llamado ooloi. Son precisamente los ooloi los que poseen la capacidad de cambiar el cuerpo humano: eliminar enfermedades, dolencias, e incluso mejorar su fuerza, su velocidad o su capacidad para la recuperación. Además, tienen la facultad de compartir tanto el dolor como el placer de sus parejas. ¿Pueden los terrestres aceptar lo que los alienígenas les quieren ofrecer? ¿Aceptarán fácilmente que un ooloi sea el tercer miembro de una relación de pareja entre humanos?

«Había tenido tiempo de hacerse a la idea y de comprender que su lucha no sería contra alienígenas no humanos, sino contra los de su propia especie».

Alienígenas, supervivencia, injusticias, adaptación, transformación, sexo, familia… Amanecer, de Octavia E. Butler, el primer libro de la estirpe de Lilith es fascinante. No solo nos presenta un universo rico e imaginativo, repleto de tecnología viva o seres alienígenas que causan tanta repulsión como atracción. Sino que también le permiten a la autora hablar de los temas que le preocupan de verdad, como el ecologismo, el racismo, el colonialismo, la violencia o el machismo. Sufrí mucho junto a Lilith en su interacción con los otros humanos, pero eso es mejor que lo descubran al leer. Me he quedado con muchas ganas de empezar el segundo libro. Y creo que a ustedes les pasará algo similar. ¡Leed a Butler! Esta reedición con la revisión de Pilar Márquez a la traducción de Luis Vigil es la oportunidad perfecta para hacerlo.

¿Han leído Amanecer? ¿Les llama la atención?

Reseña: Ritos de madurez, de Octavia E. Butler
¿Qué significa ser diferente? ¿Qué estarías dispuesto a sacrificar para darle a la humanidad otra oportunidad? Imagina lo complicada que sería tu vida si fueses el primer ser masculino nacido de una mujer humana con ADN extraterrestre. Ser el primer hombre que une en su cuerpo a humanos y a oankali, esos extraños alienígenas que salvaron a la humanidad y a la Tierra del exterminio causado por sus absurdas guerras. Hoy quiero recomendarles Ritos de madurez, de Octavia E. Butler. El segundo libro de la Trilogía Xenogénesis que ahora podemos encontrar en librerías gracias al sello Nova recopilada en un solo volumen: La estirpe de Lilith. Con la traducción de Luis Vigil corregida por Pilar Márquez.

«Sentirán resentimiento hacia él por no ser completamente humano y parecerlo más que sus criaturas. Lo odiarán por aparentar mucha menos edad de la que parecerá tener cuando hable. Lo odiarán porque a ellos no se les ha permitido tener hijos varones. Tu gente ha hecho que los niños con aspecto humano sean un bien muy valioso».

Esta es la historia de Akin, el primer hijo de Lilith, la protagonista del libro anterior: Amanecer (Mi reseña). Aunque desde el final de la primera novela han transcurrido algunos años y Lilith ha tenido varias hijas, hasta este momento los oankali no habían permitido que las humanas tuvieran hijos varones. Porque crear individuos masculinos que fuesen lo suficientemente humanos como para nacer de otra humana podría representar el verdadero peligro para los seres extraterrestres con los que ahora comparten la Tierra. Un planeta que, al igual que las personas que ahora lo habitan, cambió para recuperarse de los destrozos que las guerras nucleares causaron.

Pero aunque una parte de los pocos sobrevivientes de la humanidad, como Lilith, aceptaron a los oankali y viven en comunidad con ellos, existen poblados de resistentes. Humanos que se niegan a tener descendencia con los extraterrestres que ya no serán completamente humanos, y que viven alejados de los habitantes de las estrellas sin posibilidades de tener hijos. Porque aunque los extraterrestres no los obligan a vivir en sus aldeas, los modificaron antes de enviarlos de nuevo a la Tierra para que no pudiesen tener hijos sin su intervención. Así, aunque ahora viven vidas más largas a las que tenían antes de la guerra, y envejecen de manera más lenta, son existencias sin futuro a largo plazo.

«Los humanos persiguen a sus diferentes, y sin embargo los necesitan para ganar ellos mismos definición y estatus. Los oankali buscan la diferencia y la recopilan. La necesitan para evitar el estancamiento y la especialización excesiva».

Aunque los resistentes no pueden tener hijos, eso no evita que busquen secuestrar a las criaturas nacidas de mujeres y de los oankali femeninos que tengan la apariencia más humanas. Esas que tengan menos tentáculos y con ello luzcan menos monstruosos y alienígenas a su parecer. Pero nunca hay dos mezclados iguales. Cada criatura es diferente y no se sabe qué aspecto tendrá una vez que pasen por la transformación o metamorfosis que sufren justo antes de convertirse en adultos. Precisamente el aspecto tan humano que presenta Akin al ser un bebé hace que sea un objetivo valioso para los secuestradores. Hombres que no podían ni imaginar que su apariencia no delataba ni su inteligencia ni su capacidad de hablar como un adulto aunque no pudiese aún ni caminar.

Lo que debería ser una experiencia traumática al verse separado de su familia, se convierte, a su vez, en una oportunidad de entender las preocupaciones de las mujeres y hombres que se niegan a unirse a los extraterrestres y que quieren conservar a toda costa su humanidad, aunque eso implique su muerte. Pero que no les engañe saber que el secuestro se transforma en una oportunidad de aprendizaje, nada justifica el dolor, el horror, el miedo y las injusticias que Akin tiene que padecer desde tan temprana edad.

«Él era lo bastante oankali como para que otros oankali lo escucharan y lo bastante humano como para saber que se estaba tratando a los resistentes con crueldad y condescendencia».

Alienígenas, diferencias, prejuicios, crueldad, sacrificios, segundas oportunidades… Ritos de madurez, de Octavia E. Butler, es un libro excelente. Una novela que amplía el maravilloso universo que se nos había presentado en Amanecer y nos habla del sentimiento de culpa que pueden sufrir los personajes que piensan que están traicionando a la humanidad al convivir con los oankali, pero también de lo importante que fue aceptarlos en un primer momento para tener la posibilidad de vivir, y quizás ahora la oportunidad de que al menos una parte de ellos permanezca humanos, a pesar de tener todo en contra. Es imposible leer a Butler y no sufrir y emocionarse junto a sus personajes. ¡Tienen que darle una oportunidad!

¿Han leído Ritos de madurez? ¿Les llama la atención?

Mi reseña de Imago:

¿Qué ocurriría si tu existencia implicase un peligro mortal para todo lo que queda de la humanidad? ¿Qué pasaría si fueses el primer ser ooloi nacido de una humana, una criatura que en teoría no debería existir? ¿Qué puedes hacer si tienes que elegir entre el destierro en una nave oankali o el exilio en la Tierra, lejos de tu pueblo y todo lo que te es conocido? Hoy en el blog quiero hablarles de Imago, de Octavia E. Butler. El libro que cierra la increíble Trilogía Xenogénesis. Novelas que se pueden encontrar en librerías gracias al sello Nova reunidas en un solo volumen: La estirpe de Lilith. Una edición en tapa dura con la traducción de Luis Vigil corregida y actualizada por Pilar Márquez.

«Sois lo bastantes listos como para aprender a vivir en vuestro nuevo mundo, pero sois tan jerárquicos que os destruiréis tratando de dominarlo y de dominaros los unos a los otros. Quizás duréis un tiempo largo, pero al final acabaréis por destruiros».

En esta oportunidad volvemos a estar en la Tierra para conocer a otro de los hijos de Lilith, la protagonista de Amanecer. La humana que fue elegida por los misteriosos alienígenas llamados oankali para que guiara a su pueblo en la aceptación de los salvadores llegados de las estrellas. Seres que habían logrado mantener con vida a una pequeña parte de la humanidad de la devastadora guerra nuclear que aniquiló el planeta y a casi toda su población. Pero cuya ayuda llegó también con un precio: para salvarse debían aceptar unirse con los extraterrestres y compartir su ADN.

Jodahs, nuestro protagonista en esta ocasión, creció como un ser construido más: de una madre humana, pero también con ADN oankali gracias a la ayuda de un ser ooloi. Un alienígena que no es ni masculino ni femenino, sino de un tercer sexo totalmente nuevo. Pero aunque todos creían que Jodahs al pasar por la metamorfosis que lo trasformaría en adulto sería un construido de sexo masculino, resulta que empieza a cambiar para convertirse en ooloi, el primero nacido de humana y el verdadero peligro para todo lo que queda de la humanidad.

«Nadie estaba preparado para un construido ooloi y, desde luego, nadie estaba preparado para un construido ooloi nacido de humana. ¿Acaso podía existir un ser potencialmente más letal?».

Ya que los ooloi son capaces de manipular el ADN de todos los seres vivos con los que interaccionan, la existencia de Jodahs es un peligro muy real. Descontrolado o sin ser consciente de ello podría causar todo tipo de enfermedades en aquellos a los que tocase, porque su propia naturaleza le obligaría a buscar ese contacto, aunque lo quisiese evitar. Por todo su potencial desconocido y letal, los alienígenas quieren alejarlo de la Tierra, enviarlo a la nave para poder controlar su desarrollo y evitar posibles daños. Pero Jodahs tiene claro que esa no es la vida que quiere. Separado para siempre de otros humanos.

Es por ello que decide exiliarse junto a su familia pero en la Tierra. Buscar un lugar donde explorar sus capacidades de manera segura. Encontrar su lugar en un mundo que le teme, pero al que no puede renunciar aún. A través de su búsqueda descubriremos que lo que todos recelan como un peligro puede ser la respuesta para terminar con el rechazo instintivo que aún sienten muchos humanos por los oankali y todo lo que representan. Para todos los resistentes que se niegan a perder su humanidad y prefieren la muerte a tener hijos con ellos.

«Yo iba a ser la versión más extrema de un construido, no únicamente una simple mezcla de características humanas y oankali, sino que sería capaz de usar mi cuerpo en modos inimaginables para los humanos o los oankali. Sinergia».

Alienígenas, prejuicios, metamorfosis, crueldad, amor… Imago, de Octavia E. Butler, es el cierre perfecto para la Trilogía Xenogénesis. Una novela en la que de nuevo Butler explora un futuro hipotético, mientras habla de problemas muy reales como el racismo, el machismo o el consentimiento. Si están buscando una trilogía que les vuele la cabeza tienen que darle una oportunidad. de nuevo gracias a Nova por recuperar estas historias, Butler es una de esas autoras a las que hay que leer sin dudar. Porque sus mundos, aunque crueles o pesimistas, tienen un lugar también para la esperanza, y eso los hace aún más espectaculares.

¿Han leído Imago? ¿Les llama la atención?





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