Te veré bajo el hielo

¡Me ha gustado mucho! Se trata de una novela negra en la que nada es lo que parece y en la que se mantiene la intriga hasta el final.

Tengo que reconocer que desde el principio me atrajo tanto el título como la portada. Pero bueno, iré por partes. El título se asocia fácilmente con la trama de la novela, pues esta se inicia cuando aparece muerta una chica bajo una capa de hielo. Se trata de una joven que pertenece a una familia adinerada y cuya forma de vida dista bastante de la que la gran mayoría le asocia.

La portada me gusta muchísimo. Es sencilla y elegante, pero a la vez invita a averiguar qué se oculta bajo esa capa de hielo. Las letras rojas del título resaltan claramente sobre el fondo y el color rojo es un claro acierto.

En cuanto a la trama, tras la aparición casual del cadáver de Andrea bajo una capa de hielo se inicia toda una investigación para tratar de averiguar qué le ha pasado y quién es el responsable, sin embargo, la inspectora jefa Erika pronto establecerá conexiones con asesinatos cometidos hace años. Pero no se queda aquí la trama, sino que la propia Erika se convertirá en protagonista de una gran parte de la novela, y no solo por su labor de investigación, sino como víctima.

En lo relativo a los personajes, sin duda Erika ha sido mi favorita. Es una mujer valiente, aunque con los miedos e inseguridades que, de una forma y otra, todos tenemos y que no le avergüenza reconocer. Erika es capaz de recomponerse cuando todo parece hundirse, que afronta la adversidad con valentía y que sabe mira hacia el futuro cuando reconoce que el pasado es insalvable.

La novela está dividida en 83 capítulos y el epílogo. Estos son más bien cortos y finalizan en el momento justo para invitarte a seguir leyendo.

En definitiva, es una novela que recomiendo a todos los amantes de la novela negra y de misterio. Ya estoy esperando el momento para leer su segunda novela, Una sombra en la oscuridad. Título que, en cierta medida, me recuerda a un personaje de Te veré bajo el hielo.