Es un clásico y en la época en la que fue escrito debió ser toda una revolución. Jane es fuerte, resuelta, independiente y de convicciones firmes. Tuvo una infancia dura, huérfana y rechazada por aquellos que se hacían cargo de ella, para acabar en una escuela de beneficiencia. Aún así gracias a su determinación se las apaña para labrarse un futuro como institutriz y conocer a Mr Edward Rochester, del que se acaba enamorando, pero nada en su vida es fácil. Mr Rochester me descoloca, es el galán de la historia pero es feo, rudo, bruto, y con esos "atributos" la enamora, cosa que no llego a comprender bien, sobretodo porque los percibo alejados, diferentes y distantes y sin embargo surge la llama del amor. Hay otro personaje masculino, el de John Rivers, que por más que Jane lo intente mostrar como un Adonis encantador a mi me parece machista y detestable. El final me parece bueno, sorpresivo y justo. |