Mejor es tener paciencia y obrar de modo que nadie sufra sino uno mismo.
|
Mejor es tener paciencia y obrar de modo que nadie sufra sino uno mismo.
|
Los extremos se atraen.
|
La belleza está en los ojos de quien mira.
|
¿En el mundo quién se preocupa por ti? ¿Quién te pedirá cuenta de tus actos? Yo me preocupo de mí. Debo cuidar más de mi honor cuanto más sola, con menos amigos y más abandonada me encuentre. |
su recuerdo me seguía acompañando, pues no se trataba de una imagen vaporosa que los rayos del sol pudieran dispersar, ni de una efigie trazada en la arena que las tormentas pudieran borrar, sino que era un nombre grabado en una losa, destinado a perdurar tanto como el mármol en el que estaba inscrito.
|
Gentil y dulce ensoñación, que te acurrucas entre mis brazos en estos momentos, acabarás levantando el vuelo como lo han hecho anteriormente tus hermanas, pero bésame antes de marcharte, abrázame.
|
Los sentimientos auténticos y generosos apenas son valorados por algunas personas
|
Mi corazón le pertenece por entero, y puede quedarse con él, aunque dispusiera el destino que el resto de mi ser hubiera de exiliarse para siempre.
|
Prolongar la incertidumbre era prolongar la esperanza.
|
No soy ningún pájaro, ni nadie me ha echado la red. Soy un ser humano libre, con voluntad independiente, y esa voluntad, que no necesita de permisos, la estoy ejerciendo ahora: me voy de su lado porque quiero.
|
Es un poema épico griego compuesto por 24 cantos, atribuido al poeta griego Homero. Narra la vuelta a casa, tras la guerra de Troya, del héroe griego Ulises