El jefe del clan: El clan MacLerie

A veces resulta difícil emitir una valoración cuando te enfrentas a un libro de estas características. No sé qué opinaréis vosotras, pero para mí el referente en histórica y clanes escoceses es Julie Garwood. Si comparo este libro con ella, diría que no está a la altura. Es una historia discreta que si bien resulta entretenida te deja con ganas de algo más. (Pero claro no podemos olvidar que la estoy comparando con la Diosa del romance histórico escocés). Si obviamos las comparaciones, que como todos sabéis son odiosas, el libro es ameno, entretenido e incluso tiene golpes divertidos. La primera parte, incluso un poco más allá de la mitad, te tiene con el corazón en vilo. Él es un ser dolido con el amor, como consecuencia de la muerte de su esposa, a la que amaba con locura y ella es víctima de un trato para salvar la vida de su hermano y que la condena a casarse con él. Sus primeros encuentros me dejaron con muy mal sabor de boca... Connor llega, la utiliza con el fin de conseguir su heredero y se va. Personalmente sufrí mucho esa primera parte y a punto estuve de soltar el libro en un par de ocasiones. Afortunadamente no lo hice y llegué hasta el final.
Tiene puntos positivos y puntos negativos, no vais a descubrir nada nuevo con su lectura (al menos yo no lo hice), es un poco más de lo de siempre. No es un mal libro, pero si lees a Jude Deveraux o Julie Garwood son temas que ambas han tocado a lo largo de sus innumerables historias. No hay nada diferente.
¿No os pasa que a veces deseáis que cambie algo y llegar más allá?
Bueno quizá lo que sucede es que yo soy especialmente exigente. El libro no está mal, repito. Es un libro que se disfruta. Si bien creo que algunos de los personajes, con una importancia bastante fuerte en la historia, aparecen demasiado tarde; el conjunto es un resultado positivo y que sin muchas pretensiones pretende hacerte pasar un buen rato.
Los personajes secundarios (dos de ellos, cuyos libros son el 2 y el 3 de la saga), han despertado mi curiosidad, especialmente Rurik, un vikingo ligón que parece algo diferente... ya os contaré mi opinión, próximamente.

Puntos a favor: La evolución que sufre Connor, de transformarse en la Bestia insensible (que en el fondo nunca llega a ser) hasta transformarse en el hombre enamorado. Tampoco podemos olvidar la sencillez de Jocelyn y su corazón puro, que a pesar de amar a otro hombre, accede a casarse por el bien de su hermano.

Puntos en contra: La falta de novedad y para aquellos que disfruten con escenas eróticas explícitas, en este libro no las encontrarán. Se pasa de puntillas sobre ellas. Curioso el hecho de que describen cinco noches de placer en un solo párrafo.

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