Recuerdo un artículo publicado por el centenario de Ray Bradbury, titulado: "El futuro era un arma cargada de poesía", para reflexionar sobre sus escritos, pero sobretodo de la particular forma que tenía de escribir, en un estilo que escapa a lo equivocadamente encasillado como "ciencia ficción" y que tiene que ver más con el uso de fantasías para intuir el futuro y con esto la fascinación, miedos y preocupaciones que tendría el ser humano en ese contexto; sentimientos que aún en el presente nos siguen-y quizás seguirán-pareciendo tan necesarios y por eso seguro su literatura nos siga pareciendo tan fresca-envejeciendo bien-a pesar que ese mañana que el sospechaba cada vez más se torne pasado. Resalto también que Bradbury no tenía ningún tipo de preparación técnica o científica-se formó en las bibliotecas publicas-sin embargo, sus historias de vida en otros planetas, dispositivos complejos y naves espaciales se expresan de forma tan natural que no es casi imposible percatarnos de ese hoyo académico, y es que sus relatos no son sólo tecnología, sino también poesía, fascinación, soledad, incertidumbre. Leyendo este libro he vuelto a recordar y sentir todo eso, tan igual como si estuviera flotando, irremediable, en el vacío espacial de su cuento "Caleidoscopio" ; tan igual como si estuviera sentado a la orilla del mar contemplando el atardecer. En los demás coincido con mucho de las otras reseñas. de lectura esencial. Puntaje: 9/10 Cuentos favoritos: Caleidoscopio: sobre unos viajeros cuya nave se estrella con un meteorito y caen en el espacio. La pradera: sobre una habitación que a través de la realidad virtual es capaz de hacer realidad cualquier fantasía. Los desterrados: antecedentes de Farenheit 451 Marionetas SA: una empresa es capaz de crear una réplica robótica exacta de ti mismo, tan exacta que hasta es capaz de querer tu propia vida, quitartela. |