El hombre ilustrado

Lo que me apasiona de Bradbury es la manera que tiene de plantear situaciones donde es capaz de cuestionar un aspecto de la sociedad o de la vida.
Este libro esta compuesto por cuentos de ciencia ficción que no tienen muchos términos científicos ni son pesados de leer. Son cortos y ágiles.
Entretenidos, divertidos, frescos y atrapantes. Y, encima, siempre te dejan un mensaje o te plantean una pregunta que no podés quitarte de la cabeza.
En este libro cuestiona sobre el racismo, la libertad, la lectura, los límites, la paciencia, la fe, la ansiedad. Incluso se habla sobre esa sed y desesperación que tenemos los humanos por buscar siempre más allá, en otro lado, aquello que tenemos en frente o que, tal vez, tenemos en nuestro interior. Habla sobre el conformismo y el siempre desear más. Sobre el amor y el des amor. Incluso hay dos o tres cuentos que hablan sobre la muerte que me parecieron una joyita. Lo más interesante es que estos planteamientos se hacen de una manera tan sutil que no son ni pesados ni aburridos ni se siente un manifiesto filosófico.
Hay tantas cosas que uno puede sacar y analizar de estos cortos cuentos que a veces me sorprende que con tan pocas palabras pueda expresar tanto.
Es un libro que le recomiendo a todo el mundo, incluso a los que no leen ciencia ficción. Porque, si bien es de este género, no es lo principal. Sí, hay cuentos en el espacio, en otros planetas, se habla de viajes en el tiempo y de naves espaciales. Pero lo importante son los personajes, las situaciones, los pensamientos y las emociones.
Es un libro que lees y no salís igual porque te hace cuestionarte -y, si tiene éxito, cambiar- varios o muchos aspectos de la vida.
Espero pronto poder traer una reseña más detallada de cada cuento 💜
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