Una historia contada a dos voces. La del niño protagonista que recuerda cómo fue su vida familiar con unos padres bastante especiales; y los fragmentos intercalados del padre, escritos para una novela que cuenta la realidad y anticipan el paso a la oscuridad de los trastornos mentales. Tres protagonistas: Camille, una madre con una gran fantasía, capaz de festejar la vida, viviendo entre invitados, bailes y alcohol, día y noche; Georges, un padre vitalista, alegre y poco convencional, que cada día le da a su esposa un nombre distinto, y así cada día es una nueva aventura con una nueva persona; y Gary, un niño tratado “como a un personaje de novela”, que no asiste al colegio y es educado con las ideas educativas de sus padres, un niño feliz. Una novela corta, tierna y amarga, surrealista y muy real, que te atrapa por cómo se van desarrollando los hechos; porque llegamos a pensar si hay límites para el amor y la extravagancia o los hay entre la aventura y la locura; porque es una preciosa historia de locura y amor Esperando a Mister Bojangles es un libro para recrearse en la lectura. Una novela que va enganchando poco a poco, que sabe a la canción que lleva en su título. |