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El autor comienza el libro hablando en su propio nombre y poniéndonos en el contexto histórico del momento donde se sitúa la historia: Florencia, año 1348, en pleno auge de la peste negra, todo enfermedad y muerte. Una vez hecha la introducción, comienza la historia en sí, protagonizada por 10 jóvenes, que llevarán a cabo un total de 100 narraciones (10 días, 10 personajes) de distinta longitud, aunque ninguna demasiado larga. A pesar de saber que hay que ver las cosas con la perspectiva y la mentalidad de la época en la que fue escrito, me ha costado muchísimo no tirar el libro de la indignación que me producía ver el papel de las mujeres en cada una de las historias, y de ver como las propias narradoras daban lecciones y consejos tan sumamente machistas a sus compañeras. Los clásicos no suelen gustarme mucho, por eso cogí este libro con pereza y por eso me costaba ponerme a leerlo (así han pasado 2 meses desde que me decidí a empezarlo). Aunque no se hace pesado de leer, mi mala predisposición ha jugado mucho en mi contra y no lo he disfrutado demasiado. |
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