En 1923 Vicente Blasco ibañez ya era un hombre millonario, especialmente por las ventas mundiales de su novela Los cuatro jinetes del apocalipsis. Hombre que tenía un sentido internacionalista del mundo y la política era un gran aficionado a los viajes, al contacto con otras culturas y otras gentes. Emprende pues ese año una vuelta al mundo como hacían entonces los millonarios, en barco y con varios meses por delante, acompañado de la que era entonces su amante, a la que menciona solo de pasada y sin referirse a ésta como tal, y la asistenta de ella. De los países que visita nos cuenta su pasado, su presente y que puede deparar el futuro. Es un libro extenso, en ocasiones de hace un poco lento de leer, pero es ameno y muchas de las reflexiones de D. Vicente son válidas hoy en día, además de mostrarse como un auténtico visionario sobre algunos acontecimientos que iban a protagonizar los años siguientes. |