Cuando estoy contigo -susurró-, no me importa quemarme.
|
Cuando estoy contigo -susurró-, no me importa quemarme.
|
Aléjalo. Contrólalo. Domina el fuego.
|
No te imaginas como me sientan tus palabras, señorita Fuego. Tardé años en conseguir todo este hielo. Pero tú podrías fundirlo y yo quedaría en nada.
|
Odiaba el frío. Quería arder. Yo era fuego
|
¿Qué criaturas mágicas podemos encontrar en Gringotts, el banco de magos?