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Estaba deseando seguir con las aventuras y desventuras de Valeria, Lola, Carmen y Nerea, ver cómo siguen evolucionando y nos sorprenden. También quería saber que pasaría con Valeria y Víctor, con su relación tan intensa, pero también con Adrián, con su matrimonio. Por lo que no pude resistirme ni un día para hincarle el diente a esta novela. Como siempre, no paré de leer en horas, hasta devorarla. La forma de escribir de Elisabet engancha. Es tan informal, cercana e íntima, que parece que estés pasando el rato con tus amigas. Lo único que me desubicó bastante fue una decisión que toman ambos protagonistas al final. Quise matarles.
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