No somos mitades de naranja que caminan por el mundo tratando de encontrar a nuestra única alma gemela. No. Podemos enamorarnos mil veces, equivocarnos, rompernos, volver a empezar. No hay una única persona para nosotros. Podermos ser felices de muchas maneras, incluso solas..., a veces se nos olvida.
|