Cruzada en 'jeans'

Descubrí esta novela juvenil de la manera más inverosímil: a través del libro de lengua y literatura de 3 de la ESO. Había un fragmento y me picó tanto la curiosidad que lo busqué en la biblioteca y me lo leí.

Así, a mis tiernos 14 años descubría yo lo que molaban los viajes en el tiempo, lo terrible que fueron las cruzadas infantiles (sí hijas, sí... existieron cruzadas integradas únicamente por niños y niñas) y que las portadas feas pueden esconder grandes historias.

Porque la historia atrapa. Aunque no te mole la historia, te metes y te implicas. Y sufres con casa niño que cae (para no levantarse jamás) por el camino a tierra santa. Y sonríes con cada logro.

Es un libro perfecto para salir de un bloqueo lector o para un/a adolescente al que queremos atrapar. E incluso para aquellos que quieran iniciarse en la novela histórica.

¿Quién no ha soñado alguna vez con viajar a otra época? Rudolf Heftling, un chico del s XX, es transportado por medio de un experimento a 1212. Allí se encuentra con la Cruzada de los niños, que parte desde Alemania para intentar liberar la Tierra Santa. Rudolf comprobará qué diferente es la vida en la Edad Media: deberá buscar comida, protegerse de las inclemencias del tiempo y vivir en una sociedad en la que la religión ocupa un lugar fundamental. También encontrará amistad y con sus conocimientos del s XX intentará ayudar al resto de niños de la Cruzada a lograr su objetivo, ¿Lo conseguirá?

La Cruzada de los niños se basa en un hecho histórico que inspiró entre otros el cuento de El flautista de Hamelín.

Otro libro de mi juventud que también me sorprendiera gratamente.
Todavía hoy recuerdo las cruzadas de ese chico en vaqueros.
Con libros como este, donde se mezcla historia y ficción, creo que se ayuda a la juventud a conocer mejor partes de nuestra historia, así como a gustarle la lectura, como forma de viajar, de conocer otras culturas, la historia...