Cadáver exquisito

Un virus ataca terriblemente a todos los animales del planeta, el ser humano decide extinguirlos ante el miedo a que puedan contagiarse las personas. Empieza una época de terror donde los animales son perseguidos y asesinados. Una vez que en el mundo no quedan animales, los humanos no quieren dejar de comer carne. Así que empieza una nueva persecusión, pobres, inmigrantes, marginados, pasarán a convertirse en el alimento de los poderosos. Ante esta premisa tan interesante, con una aparente crítica que se me antojaba tan a fin a mí, debo admitir que no he salido del todo encantado. Quizás esperaba otra cosa, pero vamos por parte.

Pese a que las escenas me han parecido super crueles y super explícitas, me ha maravillado darme cuenta lo horrible que nos puede llegar a parecer lo que les hacemos a otras especies, cuando es el ser humano el que lo sufre. El tratamiento de los humanos como animales en un matadero te revolvía las tripas, pero siempre pensaba "joder, pero es que esto es lo que hacemos con los animales". En ese sentido me ha encantado. Remueve lo que tiene que remover. El ser humano es capaz de llegar a esto y mucho más. Y el libro eso lo refleja perfectamente. Lo que ya no me ha gustado tanto es que siempre que iba a ver una escena de violencia hacia alguna de estas personas a las que llaman "cabezas" para deshumanizarlas, el ejemplo en escena siempre era una mujer. No sé, no le he terminado de ver el sentido a eso, la verdad.

Quizás el principal problema lo he encontrado con el personaje principal a través del cual vamos a conocer la historia. Y es que aunque en apariencia repudia el nuevo sistema y solo se ve inmerso en actividades relacionadas con estos mataderos para sobrevivir, realmente conforme iba avanzando en la novela, me parecía igual de horrible que el resto de personajes. Y en este tipos de historia, para que el mensaje llegue claro, se me hace necesario un contrapunto. al menos un personaje tiene que servir de opuesto, si no la crítica o el impacto de la misma, al menos para mí, queda muy diluida.

Y para rematar el final me ha cabreado horrores. Y no me ha gustado nada, porque reincide en lo mismo. No hay contrapartida a la historia. Todo el mundo es igual. Y al menos a mí, ese tipo de historias donde no puedo entender a nadie, me cuesta más digerirlas. de hecho, al final siento que el libro no lleva a nada. Y me da mucha rabia sentir eso al acabar un libro, y más cuando al principio me estaba pareciendo brutal. En fin, es un buen libro, con una buena propuesta, pero que podría haber sido espectacular con otro tipo de protagonista. Me apetece seguir investigando sobre la autora, porque original es un rato.