Lluvia de primavera

La historia nos cuenta la vida de dos mujeres totalmente distintas pero con un pasado en común: el dolor y sufrimiento. Primero nos encontramos con Shu Mei, una monja guerrera superviviente del amasacre en su convento. Por otro lado vemos a Chun Yu, una adolescente de 14 años que vive junto a su tío en un pequeño pueblo sumiso a una banda que exige una serie de impuestos muy elevados a sus ciudadanos. El nexo que les unirá será Wong el Tigre, al cuál Chun Yu tendrá que hacerle frente.

La historia me enamoró desde un principio, la pluma de la autora es muy delicada y sensible y nos transporta a la China feudal rápidamente. Desde la primera página estaba enganchada a la novela y claramente la terminé en un suspiro. Tiene muy pocas páginitas pero una historia completa de principio a fin.

A demás nos enseña la espiritualidad de esta lucha, el Kung-fu y cómo, además de hacer fuerte físicamente, lo hace psicológicamente.