Un libro cortito que me ha costado leer. Una cultura diferente, muchas referencias a autores y libros de cocina ingleses, que se repiten sin parar, un montón de palabras sin traducir y la traducción que creo que no es muy buena, han conseguido que no lograra conectar del todo con la historia. La parte buena la marcan los topicazos con los libros de recetas y en la cocina en general, te sientes identificado y es imposible no partirse de risa, como por ejemplo ese cabreo cuando estás haciendo una receta y las medidas son: una pizca, un trozo... 😡 ese cabreo no necesita traducción, ese es universal!! 😅 |