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La trilogía El Cuarto Mono de J.D. Baker se ha convertido en mi saga favorita del género de suspense y policial. Desde que comencé su lectura hace dos años he esperado con muchísimas ganas cada lanzamiento y, por supuesto, este desenlace tan sorprendente del que os vengo a hablar hoy. La trama empieza justo donde terminó la segunda parte y nos encontramos con Sam Porter detenido y confundido. Hay pruebas que le incriminan y le asocian con el Cuarto Mono, Anson Bishop. Sam no recuerda haberle conocido antes de que se iniciase el caso y la búsqueda del asesino en serie conocido como El Cuarto Mono, y las imágenes que tiene la policía en su poder son previas a la investigación policial y lo tienen completamente descolocado. Por otro lado, Claire, Pool y Nash han de hacer frente al SARS, un virus letal que Bishop ha propagado y que está empezando a causar estragos. Mientras tanto, la cantidad de cadáveres se siguen apilando y todas las víctimas siguen el mismo patrón de El Cuarto Mono. ¿Qué ocurrirá? ¿Quién es Sam en realidad? ¿Qué relación guarda con Bishop? ¿De verdad están compinchados? ¿Podrán detener el virus a tiempo? Si de las reseñas de las novelas anteriores podéis haceros una idea de lo mucho que me estaba gustando esta trilogía, con el desenlace de la misma solo puedo decir cosas buenas. Este libro ha sido magnífico y cierra con broche de oro una trilogía más que perfecta y adictiva. Es una historia trepidante, con unos personajes muy carismáticos y bien definidos. En los thriller suele ser difícil empatizar con todos los personajes pero, en este caso, me ha encantado ir saltando de un personaje a otro y verlos evolucionar y atar cabos por su cuenta, enfrentándose a diferentes peligros y pistas. Todos los personajes son increíbles y fascinantes, humanos, con sus tonos grises y, en especial, con sus defectos y virtudes. ¡Incluso el antagonista! Ninguno tiene desperdicio. Tengo que destacar también que todo esto se debe a la narración coral que se ha mantenido desde el inicio de la trilogía, con narración desde el punto de vista de los personajes como Claire, Sam Porter, Nash... de esta forma se nos permite conocer diferentes puntos de vista y posturas en cuanto al estado en el que se encuentra la investigación policial y la búsqueda y captura no solo de Anson Bishop, también conocido como El Cuarto Mono, sino también con respecto a la supuesta relación e implicación del detective Sam Porter con el asesino en serie. Y a todo esto hay que añadir las entradas del diario de El Cuarto Mono, que nos permite trasladarnos a su pasado, a su adolescencia e infancia, para dilucidar y atar cabos sobre los motivos que le han llevado a actuar como lo hace en el presente, así como las conexiones personales y las personas con las que tiene contacto o se ha ido cruzando a lo largo de su vida. Es un punto de vista de lo más atrayente y lo he disfrutado muchísimo. Siempre resulta interesante conocer el punto de vista del villano. La Sexta Trampa ha sido una novela llena de misterio, de asesinatos y de giros totalmente inesperados y que dejan con la boca desencajada. No los esperas para nada y, al mismo tiempo, una vez que ocurren, todo tiene sentido y lógica. J.D. Barker sabe muy bien como meter cada detalle en la trama, cada giro, cada sorpresa, para que el lector siga emocionándose a cada paso de página, preguntándose cuál será el siguiente desvío que tomará la trama y cómo resultarán las cosas para cada personaje implicado. Barker juega muy bien con el lector hasta el final, haciéndole creer mil cosas, jugando al despiste y revelándolo todo en el momento justo. Como ya comentaba al principio, en esta tercer parte, a parte de los asesinatos del Cuarto Mono y su posible cómplice, los agentes también tienen que hacer frente a la expansión del virus SARS, y este hecho es el que más me ha puesto los pelos de punta dada la situación actual en la que nos encontramos con la COVID-19. Ha sido algo raro y extraño por la similitud en ese aspecto con la realidad a la que nos estamos enfrentando a nivel mundial en la actualidad. Pero, quizá por ello, por la cercanía también a la realidad, la lectura ha volado en mis manos, y eso que son más de 600 páginas. Es una trama amena, adictiva y que se devora sin darte cuenta. Además, el final... ¡madre mía! Qué estrés y tensión. Los últimos capítulos son un no parar de información, acción y revelaciones que te mantienen expectante y alerta. Un final perfecto para una trilogía perfecta. En resumen, 'La Sexta trampa' es el desenlace de una trilogía diez. Una lectura recomendadísima para todo amante del thriller y las novelas de suspense con asesinos en serie y giros de trama llenos de adrenalina y tensión. J.D. Barker sabe muy bien como meter cada detalle en la trama, cada giro, cada sorpresa... Es un autor que juega muy bien con el lector hasta el final, haciéndole creer mil cosas, jugando al despiste y revelándolo todo en el momento justo. Un final perfecto para una trilogía perfecta. Enlace: https://eraseunlibro.blogspo.. |
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