Océano mar

¿Os ha pasado alguna vez que mientras leíais un libro por primera vez solo podíais pensar en las ganas de releerlo?

Pues eso es lo que me ha pasado a mí con este Océano mar de Alessandro Baricco, y es algo que no me había pasado nunca.

Esta es una historia de lo más original en la que una serie de personajes coinciden en una posada a orillas del mar, la cual es regentada por unos curiosos niños. Cada huésped tiene un motivo diferente para estar allí pero a todos les une lo mismo: el mar.

Me ha fascinado la forma del autor de contar la historia, a veces encantadora, otras tan absurda como divertida, dramática y por momentos desconcertante. Cómo confluyen entre sí unas historias con otras, la forma de hilarlas y hacer que vayan adquiriendo sentido aunque a priori parezca que no tienen nada que ver.

Lo cierto es que cuando he empezado a leerlo no podía imaginar todo lo que esta historia iba a hacerme sentir, pensaba que quizá era una prosa demasiado edulcorada, con demasiados adornos... Ahora sé que es porque no he leído demasiado a Baricco porque según avanzaba en la trama me iba enamorando más y más de su forma de escribir. Me fascina que en una novela tan breve sea capaz de conducirnos por las historias con tanta intensidad, haciendo que la lectura sea una experiencia única.

Mucha gente me ha dicho que se ha desesperado con este libro, pero creo que superando las primeras páginas se va notando cómo el autor nos sumerge de lleno en estas fascinantes historias que van y vienen, se aproximan y se alejan con el ritmo y la cadencia del mar, mostrándonos la pasión que ejerce el mar en las personas, poniendo de manifiesto la increíble fuerza de la naturaleza y como influye en el comportamiento de las personas.

Una historia plagada de poesía, fantasía y simbolismo que da la sensación de visitar un lugar al margen del tiempo; una historia que te balancea en un mar en calma para después sacudirte como en una tormenta oceánica; una historia que, al terminar, hace que te sientas como un náufrago en una isla desierta; una historia con tan infinitas lecturas como infinito es el propio mar y todas tan profundas como el mismo océano.

No puedo decir otra cosa más que es un libro que me ha parecido fascinante y que ha ascendido de un plumazo a la categoría de mis lecturas favoritas.

Como os decía al inicio, acabo de terminarlo y ya estoy deseando leerlo otra vez. Simplemente maravilloso.
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