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El tópico del amor imposible es uno de los más empleados en la literatura. No obstante, es tan fácil identificarse con él y suscita tantas y tan intensas emociones que, a mi parecer, aunque pasen cientos de años y se escriban miles de novelas más en su honor, este siempre seguirá siendo atractivo para los lectores ávidos de historias en las que prevalezcan los sentimientos. Sin embargo, nunca está de más agradecer cuando dicho tema se aborda de manera poco convencional. Sí, ya sé que a estas alturas es imposible pedirle a un autor que cree tramas cien por cien originales, pues de seguro todas ya han sido pensadas y tratadas antes. Empero, también es cierto que algunos conflictos que se plantean, en cuanto a lo que de mantener separada a una pareja respecta, son más trillados que otros. Por ejemplo, eso de la diferencia de clases sociales o de edades, son argumentos harto explotados que, aunque han dado paso a grandes obras, para este entonces se torna complejo causar gran impacto acudiendo a ellos… Mas otro es el cantar cuando se echa mano de problemas que realmente pueden ser insalvables, como el que expone la presente obra. Pero bueno, si bien quisiera decirles mucho acerca de esta novela, no puedo hacerlo sin arruinarles la experiencia que pueden tener si entran a ella como yo, es decir, desconociendo su argumento casi que por completo. Y es que sí, cuando yo decidí leerla solo sabía que coqueteaba con la fantasía. Y, pese a que no pretendo despertar su interés por ella con tan poco, no será mucho más lo que diré. Basta mencionarles que esta historia gira en torno a un hombre que regresa a su pueblo natal en búsqueda de un amor juvenil, mas aunque encuentra al objeto de su adoración, también se topa con la comprensión de que eternamente él mismo será su propio rival en el corazón de su amada. Una novela muy corta pero narrada con un lenguaje bellísimo, y estructurada con gran ingenio, que hace reflexionar acerca del destino, las decisiones tomadas y el poder de ese gran amor que, una vez hallado, no se puede desterrar ni reemplazar en el corazón. |
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