La proposición

Supe de la existencia de este libro gracias a la Quedada Bloguera de este año y tras la presentación que hizo la editorial quedé bastante enganchado a este título, sobre todo porque aseguraban que no caía en los clichés de los romances de época. Así que, cuando vi la oportunidad, lo pedí y más tardó en llegarme que en lo que lo leí, jaja.

Hugo es un ex soldado de guerra y su última misión fue tan heroica que fue nombrado Lord, ahora lo único que quiere hacer es disfrutar de paz y tranquilidad en una casa del campo, pero con la muerte de su padre queda a cargo de sus negocios y debe honrar su posición, cumplir con los estándares de la alta sociedad y conseguir una esposa. Gwendoline es una joven viuda que ha guardado luto por tantos años, ya se acostumbro a estar sola y no planea volver a casarse. Sus caminos se cruzan de la manera más inesperada, Gwendoline sufre una lesión y Hugo es el único que puede ayudarla. Tras este breve encuentro surge una pequeña chispa de atracción, pero ¿será esta suficiente para superar todo lo que no soportan el uno del otro?

Creo que no hay mucho que mencionar respecto a la trama, básicamente es un romance entre un par de personas que se acaban de conocer y descubren que no tienen nada en común más que la simple atracción física. Lo importante para que se pueda dar esta relación y su posterior crecimiento son las personas que están a su alrededor, ambos protagonistas tienen una amplia red de apoyo que hacen que la historia se desarrolle y tenga varios matices.

Hugo es un ex soldado de guerra que sobrevivió a la tragedia y que, tras un año de guardar luto por la muerte de su padre, debe poner su vida en orden: atender los negocios de su padre, ser la cabeza de su familia, casarse, tener hijos y cumplir con sus deberes sociales, cosas que no había realizado nunca y ahora lo abruma la simple idea de tener que hacerlo. Con Hugo tengo una relación complicada, en un principio me encantaba por su aire oscuro, atormentado y reservado, sinceramente, se estaba volviendo un potencial crush y el hecho de que fuera honesto consigo mismo y con aquellos a los que considera cercanos le daba puntos. El problema es que es un cabezota y tiene los prejuicios muy arraigados, considera que las personas ricas no conocen el valor del trabajo duro y que lo único que hacen es ver a los demás por encima del hombro, haciendo que se sienta moralmente superior a los demás porque conoce el cansancio y compromiso del trabajo físico y crea fielmente en que las clases sociales están dividas por algo y así deben permanecer, los ricos con los ricos y los pobres con los pobres porque son polos opuestos que jamás llegarían a comprenderse o aceptarse. La verdad es que en un principio no tenía problema con eso y esperaba que a partir del encuentro con Gwendoline cambiara, que su atracción hacia ella le hiciera replantearse las cosas (porque ella es de la clase alta) y tuviera que enfrentarse a más de un demonio interno. Pero no, no crece, no se esfuerza por cambiar, se queda atascado en esos pensamientos aunque hay miles de cosas que le hacen ver que está equivocado y, siendo sinceros, aburre, llega un momento en el que me preguntaba cuál era el caso de tener su punto de vista si solo se iba a quejar porque no encaja en el mundo de los ricos y no hiciera nada por cambiar esto.

Gwendoline lleva siete años viuda y sus 32 años ha tomado costumbres de toda una señora de más de cincuenta, está segura en no querer conocer a ningún otro hombre y que con ver a sus familia crecer es suficiente, simplemente se conformará con lo que la vida decida darle. A ella empecé detestándola porque es sumamente insoportable, anda con aire de resignación y victimización altísimo. Cuando se encuentra con Hugo, aunque siente la atracción hacia él, niega sus sentimientos porque está resignada a que no merece nada y que terminará sus días como una viuda (muy dramático y fatalista para una persona tan joven). Me gusta el trasfondo de su historia porque también es trágico y conforme conocemos lo que significó para ella su matrimonio y lo que tuvo que vivir en él llegamos a empatizar con ella. Poco a poco comienza a cambiar su actitud y se permite sentir, vivir, ser la mujer joven que es y se da cuenta que el haber vivido una tragedia no tiene que marcarla de por vida, tenemos un claro crecimiento y un cambio en su conducta y actitud. Siento que Gwen es la que carga la historia, toma al toro por los cuernos y por ella la relación toma rumbo. FAN.

La narrativa es muy amigable, no es para nada pesada y nos brinda la perspectiva de ambos protagonistas, permitiéndonos adentrarnos en lo que viven, sienten, sus pasados y las relaciones que tienen fuera del romance. No hay descripciones excesivas y se nos presentan un par de tramas extra que le dan un toque interesante a la historia, en especial la hermana de Hugo (estaba más interesado en lo que le pasara a ella que en el mismo Hugo, jaja). Y mi parte favorita es que los personajes masculinos principales (el club de los supervivientes) no son machistas ni tienen la personalidad misógina de sus contemporáneos, así que no hay red flags o romantización de conductas inadecuadas.

Nuestros protagonistas son polos opuestos, no se soportan y tienen que convivir por cuestiones del destino. Me gusta que al principio queda claro que lo que hay entre ellos no es amor a primera vista sino atracción física y que solo están cediendo a sus impulsos carnales. Teniendo claro que lo que hay entre ellos es tensión sexual, hay un tira y afloja que inició gustándome bastante porque la primera parte de su encuentro se da en una mansión, así que básicamente están en un ambiente seguro y de confianza donde se ven obligados a convivir entre ellos, y claro que disfrutaba cuando este par estaban solos y había un silencio incómodo porque solo querían sacarse la ropa, pero sus orgullos (y en cierta medida también los modales, jsjs) no se los permitían. Cuando este ambiente seguro se rompe y son enviados al mundo exterior, notan que la tensión que había entre ellos es algo más y deben lidiar con las consecuencias de no haberse arriesgado a no ir más allá. Luego se ven obligados a convivir en sociedad, estar presentes en los bailes y rodeados de desconocidos, y como Hugo sigue con su misma actitud, bueno, pues el hechizo se rompió y me cansé del tira y afloja, siempre dando vueltas en lo mismo: que Hugo no se sienta suficiente para estar en la alta sociedad, no quiera pertenecer a ella, ni cumplir con los estándares que se esperan de su título, y que Gwen tenga que reprimir su evidente enamoramiento hacia alguien que no está dispuesto a arriesgar su seguridad.

Algo que agradecí es que se cuidaran las escenas sexuales, de verdad se sienten incluidas en los momentos adecuados y no solo puestas para rellenar o como recurso para que pasaran cosas. Hugo es bastante caliente y piensa y dice explícitamente las cosas que le gustaría hacer, pero nunca se llega a sentir vulgar o inapropiado porque pasa cuando la tensión sexual se puede cortar con un cuchillo, por lo que podría llegarse a considerar una conducta normal, común y corriente.

Tengo que hablar sí o sí de el club de los supervivientes, que por algo la saga se llama así. Son un grupo que se reúnen año con año para hacerse compañía en su soledad. Son siete personas, seis hombres y una mujer, que lo que tienen en común es que todos fueron afectados, en cierta medida, por la guerra. Solo puedo decir que soy fan de su amistad y confianza, a pesar de la diferencia de edad y experiencias, que hay entre ellos. La historia del superviviente que más ganas tengo de leer es la de Vincent y da la casualidad que es el siguiente libro.

En resumen, La proposición, es un libro ligero, entretenido, con un romance que evoluciona a su ritmo, con mucha tensión sexual y un tira y afloja que a veces puede llegar a ser repetitivo. Sin duda una historia para pasar el rato.

¡Hola a todos!

La novedad de este mes de julio de Titania es la primera entrega de El club de los supervivientes de la autora Mary Balogh, una serie compuesta por siete libros en la que La proposición es su primera entrega.

La serie nos narrará las historias de un grupo de siete personas que se conocieron en la mansión del duque de Stanbrook, este perdió un hijo en la guerra y quiere dar su apoyo a los soldados ofreciéndoles un lugar para que se recuperen de sus respectivas heridas. Allí encontrarán una familia con la que poder compartir su dolor y todos iniciaran una hermandad que ellos mismos denominan El Club de los Supervivientes.

Ya en el prólogo se nos presenta a los que serán los protagonistas de esta serie, los siete miembros de El Club de los Supervivientes, y se nos deja entrever los derroteros que puede llegar a tener cada una de sus historias. Todos han sobrevivido al horror de la guerra y tienen secuelas tanto psicológicas como físicas para demostrarlo. Entre ellos han creado un vínculo muy fuerte y aunque cada uno tiene su vida, no dudan en reunirse durante unas cuantas semanas al año para reencontrarse, ponerse al día con sus vidas y fortalecer sus lazos.

El protagonista de esta primera entrega es Hugo Emes, un capitán retirado del ejercito. Proviene de una familia burguesa aunque adinerada. Su valor durante la guerra hizo que le otorgaran un título nobiliario, convirtiéndose en Lord Trentham. El año anterior no pudo acudir la reunión ya que la repentina muerte de su padre se lo impidió, pero este año llega dispuesto a disfrutar del reencuentro con sus amigos. Aunque llega lleno de dudas ya que con la muerte de su padre no le queda otro remedio que hacerse cargo de las responsabilidades que ha estado dejando de lado, entre ellas la de casarse para tener descendencia a la que dejar el legado familiar, algo que no le apetece nada de nada. Para ello pretende buscar una mujer sencilla, de su clase, que entienda su forma de vida con la que sea fácil convivir.

Un día mientras disfruta de las vistas en la playa verá como una mujer que se encuentra paseando tiene una caída de la que resultará herida. A pesar de su carácter huraño, Hugo acudirá a socorrerla y la llevará a Penderris Hall en donde la acogerán durante su convalecencia.

Hugo es un hombre que carece de habilidades sociales, le cuesta relacionarse y se encuentra incómodo con la mayoría de personas, sobre todo si no pertenecen a su clase social. Esto, sumado a su imponente aspecto físico y su directa forma de hablar, hace que en ocasiones resulte tosco y grosero. A pesar de su nuevo título, sigue siendo un hombre sencillo, que se oculta bajo su máscara de frialdad y que es feliz trabajando la tierra y criando animales y no se encuentra cómodo con la nobleza ni con sus nuevas responsabilidades, en especial los negocios familiares que nunca le han interesado demasiado. Los horrores de la guerra le siguen pesando y la culpa por las vidas que dejó atrás pesan en su alma y su conciencia, y sigue sin poder superar lo vivido años atrás.

La primera opinión de Hugo sobre Gwen está cargada de prejuicios e ideas preconcebidas, desde el comienzo está predispuesto a aborrecerla, sobre todo cuando se entera de que pertenece a la aristocracia, pues la considera una mujer frívola y mimada. Pero conforme pasen los días y se vayan conociendo, las asperezas se irán limando entre la pareja hasta dejarse llevar por la atracción que sienten.

Gwendoline Grayson, lady Muir, es una joven viuda de 27 años, es hermana de Neville Wyatt, conde de Kilbourne, protagonista de Noche de amor la precuela de la serie Bedwyn, en la que este personaje ya tuvo pequeñas apariciones al igual que en Momentos inolvidables.

Han pasado siete años desde que perdió a su marido y después de sobreponerse al dolor y al duelo, se ha acomodado a su tranquila vida como viuda y aunque hay momentos en los que le pesa la soledad, no quiere ni desea volver a tener pareja, aunque aún es muy joven y toda su familia desea que vuelva a ser feliz casarse. Por las cosas que describe Gwen, su marido debía de padecer un trastorno bipolar (en esa época no se conocía aún el trastorno, al menos con ese nombre), eso hizo que su matrimonio fuera complicado y con muchos altibajos, pues ella no comprendía bien los cambios en el estado de animo de su marido y se desvivía por agradarlo y hacerlo feliz, aunque eso le hiciera hacer cosas algo temerarias que luego le pesaban.

Al comenzar esta historia Gwen se encuentra acompañando a Vera, una amiga que ha enviudado recientemente a la que están acompañando durante una temporada, pero su estancia no está siendo todo lo que ella esperaba, ya que su amiga es una mujer exigente y superficial que solo piensa en sí misma y disfruta cotilleando y tratando mal a otros soterradamente. Tras una discusión con Vera, Gwen sale a pasear en la playa, pero al subir una colina de camino de regreso al pueblo, la cojera que sufre le juega una mala pasada y acabará cayéndose, provocándose un fuerte esguince. La primera impresión al ver a Hugo es de miedo pues ese desconocido y su mirada ceñuda no inspiran demasiada confianza. Después poco a poco se irán tratando y conociendo aunque Gwen no termina de comprender ciertas actitudes y sobre todo la animadversión de Hugo hacia ella.

Ambos provienen de clases sociales distintas, y esperan cosas muy diferentes de la vida y ese será el hilo sobre el que girara toda la historia. Durante su recuperación en Penderris Hall se irán conociendo y acercando, aunque saben que entre ellos no puede haber nada dado sus distintos estilos de vida, la atracción entre ellos va subiendo de intensidad día a día. En un momento dado Hugo le pedirá matrimonio a Gwen y esta le rechazará ya que las motivaciones que Hugo expone son más prácticas que románticas, a cambio le propone que si de verdad está interesado, tendrá que cortejarla.

El libro tiene trescientas dieciocho páginas, divididas en prólogo más veinticuatro capítulos. La narración es en tercera persona. Es una historia pausada en la que no pasan demasiadas cosas ni tiene giros argumentales inesperados, pero aun así resulta muy tierno el ver como ambos van abriéndose poco a poco y descubriéndose a sí mismos y sus sentimientos. Quizá en algunos momentos puede resultar un poco lento, ya que al ser un libro que inicia la serie, dedica muchas páginas a presentar a los personajes, tanto a los protagonistas de este libro como los que serán protagonistas de los libros posteriores.

Por lo demás tenemos una historia de amor que se cocina a fuego lento, con madurez y sentido común pero sin descuidar la pasión y el deseo.

Conoceremos a un montón de secundarios, algunos de ellos serán los protagonistas del resto de las entregas de la serie, otros, como los familiares de Gwen, ya hicieron sus apariciones en las precuelas de la serie Bedwyn (Noche de amor y Momentos inolvidables).

Estoy deseando poder seguir conociendo al resto de personajes de la serie y seguramente volver a reencontrarme con estos personajes para saber como les ha ido en su felices para siempre.
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Siempre he querido animarme a leer romances de época y por fin, ha llegado el momento.

Esta historia nos presentara el club de los supervivientes, un club formado por personas que volvieron de la guerra con cicatrices. Cada año, todos se reúnen en casa de George, el duque que los acogió cuando necesitaban ayuda. Hugo ha vuelto al club. Incluso con mas ganas ya que el año pasado no pudo reunirse con sus amigos debido al repentino fallecimiento de su padre. Pero lo que no sabe es que, además de un feliz reencuentro, a la vuelta a la esquina le espera el amor de su vida.

Hasta aquí puedo decir. Para saber más, tendreis que leer la historia completa.

"La proposición" me ha parecido un libro muy entretenido. Me ha durado 3 días. Una vez empecé no podía parar.

Me encantan las historias palaciegas. Están llenas de salseo y mamarracheo y los nobles son personajes fantásticos. Orgullosos, envidiosos, siempre criticando y siempre atacándose los unos a los otros para sacar un beneficio.

Mary Balogh logra engancharte prácticamente desde que empiezas la novela.

La historia está narrada a dos voces. Unos capítulos estarán protagonizados por Hugo y otros por Gwendoline. Cada uno pertenece a un mundo distinto. 

Gwendoline es una noble que ha heredado un título gracias a su familia. Pero eso no quiere decir que su vida sea perfecta. Después de la muerte de su esposo, ha tenido una vida feliz y tranquila aunque llena de soledad.

Hugo es un héroe de la guerra, pero ese sobrenombre no le trae más que malos recuerdos del infierno que tuvo que pasar. Después de la muerte de su padre tiene que encargarse de su familia y buscar una esposa que le ayude a cumplir esta tarea. Quién le iba a decir que la iba a cumplir tan rápido. Y que encima, iba a ser amor a primera vista.

El romance será lento y aunque haya momentos de más intensidad, veremos como la relación se va desarrollando poco a poco. Hugo tendrá que aprender a enamorar a una mujer. Y ya os digo que habrá momentos dónde esta tarea se le haga muy cuesta arriba.

Sobre la ambientación, deciros que a pesar de no ser muy detallada, por la corta extensión de la historia, logra atraerte. Te explica cómo funciona el mundo de la nobleza, las distintas clases sociales, sus fiestas y sus bailes. A primera vista no lo parece, pero hay que seguir muchas normas de cortesía en cada uno de estos eventos.

Para ser mi primera novela de época, tengo que deciros que está me ha parecido perfecta para empezar. La historia es simple, no tiene apenas trama y el romance tampoco es muy complicado. El libro tiene las dosis de drama y salseo necesarias para engancharte y tenerte pegado de principio a fin.

Me he quedado con ganas de saber más sobre el resto de miembros de club de los supervivientes. Esta historia nos ha servido para conocerlos a todos. Para ver, por encima, el motivo por el que son miembros de este club. Pero todavía tenemos que profundizar más en sus vidas y en cuáles son las motivaciones de cada uno.

Este libro pertenece a una serie que forman 6 libros más, por lo que imagino que, en cada una de las historias que restan, conoceremos más a cada uno de los personajes del club. La verdad que después de ver todo lo que han sufrido en la guerra, me encantaría poder verlos alcanzar la felicidad.

En conclusión, "la proposición" es una historia qué engancha a pesar a tener una trama muy sencilla. No puedes evitar meterte de lleno en la historia, en el continuo salseo al que te somete el mundo de la nobleza a través de sus fiestas y sus bailes. El romance no podría ser más cliché pero, a pesar de eso, te atrapa. Te enamoras de los personajes y de las ganas que le ponen para lograr cortejarse entre ellos. Es un libro que os recomiendo si buscáis una lectura más ligera, con la que pasar un buen rato y desconectar un poco del mundo real.

𝙷𝚎𝚕𝚕𝚘 𝙱𝚘𝚘𝚔𝚕𝚘𝚟𝚎𝚛𝚜! Hoy os traigo la mini-reseña de 𝙻𝚊 𝙿𝚛𝚘𝚙𝚘𝚜𝚒𝚌𝚒ó𝚗, el primer libro de la saga 𝑬𝒍 𝒄𝒍𝒖𝒃 𝒅𝒆 𝒍𝒐𝒔 𝒔𝒖𝒑𝒆𝒓𝒗𝒊𝒗𝒊𝒆𝒏𝒕𝒆𝒔 de 𝑴𝒂𝒓𝒚 𝑩𝒂𝒍𝒐𝒈𝒉 que nos trae Titania.

Pese a que ya hay publicados algunos libros de la autora en la editorial, este es el primero que leo. Después de conocer a Los Bridgerton, se me ha abierto todo un mundo con la novela romántica de época y 𝑴𝒂𝒓𝒚 𝑩𝒂𝒍𝒐𝒈𝒉 sabe lo que se hace. Si bien no tiene el toque cómico que encontramos en los libros de Julia Quinn, en 𝙻𝚊 𝙿𝚛𝚘𝚙𝚘𝚜𝚒𝚌𝚒ó𝚗 encontramos un estilo más elaborado y elegante de narración. Los personajes, sobre todo 𝗚𝘄𝗲𝗻, la protagonista, me ha parecido real y coherente a su época, aunque el puntito rebelde que tiene es lo que le da vidilla al tándem que forma con 𝗛𝘂𝗴𝗼.

La trama es simple: chico salva a chica, chico y chica se enamoran, es una relación imposible pero 𝒶𝒽, 𝓁𝒶 𝓋𝒾𝒹𝒶, termina siendo posible. A priori no parece nada nuevo, pero la autora sabe engancharte con los tira y afloja de unos protagonistas demasiado tercos como para aceptar lo que los lectores y algunos personajes ya saben.

Como ‘𝘱𝘦𝘳𝘰‘ diría que la narración cambia de un protagonista a otro sin avisar y hasta que te acostumbras, confunde un poquito. En general, me ha parecido una buena toma de contacto con la autora, me ha gustado y tengo muchas ganas de saber la historia del próximo ‘𝒔𝒖𝒑𝒆𝒓𝒗𝒊𝒗𝒊𝒆𝒏𝒕𝒆'.

Para mí, 𝙻𝚊 𝙿𝚛𝚘𝚙𝚘𝚜𝚒𝚌𝚒ó𝚗 tiene una puntuación 3,75★ y os animo a leerlo si os gustan las novelas románticas de época.

La Proposición es el primer libro de la serie El Club de los Supervivientes, que gira en torno a un grupo de supervivientes de las Guerras Napoleónicas, todos marcados (emocionalmente, físicamente o ambos) por sus experiencias, y que llegaron a formar un estrecho vínculo durante su convalecencia tras la guerra.

Esta primera entrega nos presenta al primero de los siete miembros supervivientes de la guerra contra Napoleón, un club compuesto por seis hombres y una mujer. Hugo Emes, Lord Trentham, tiene más heridas mentales que físicas, pues carga con la culpa de perder a más de trescientos hombres en una batalla, pese a que esa acción en la guerra le otorgó el título de Lord. Además, Hugo heredó el vasto imperio comercial y de negocios de su padre y es extremadamente rico, aunque orgulloso de sus raíces de clase media. Y, ahora, quiere honrar a su difunto padre y asegurarse de que todo por lo que trabajaron no se pierda. Así que, quiere encontrar a una mujer práctica y lógica para casarse.
Gwendolyn, Lady Muir, es viuda y soporta su propia culpa y dolor. Se culpa a sí misma por la muerte de su marido. En una de sus visitas a una amiga y a su prima sale a caminar y termina lastimándose el tobillo en una aparatosa caída. Y es ahí cuando Lord Trentham la rescata y la lleva de regreso a la finca de los Supervivientes, donde pasará unos días hasta su recuperación. Gwen se hace amiga del Club a medida que su apego hacia Hugo se hace mayor. Ella sabe que se está enamorando de él, pero son mundos diferentes... ¿chocarán su clase social y personalidades o traerán armonía a sus vidas?

Hugo es un hombre brusco y de habla sencilla. le gusta pasar tiempo en su casa de campo, donde puede disfrutar de la paz y la privacidad de los árboles y la naturaleza. Vive con su hermanastra, Constance, que está en edad de adentrarse en sociedad. Hay algo entrañable en Hugo porque, a pesar de su apariencia feroz y severa, es amable y cariñoso. El amor por su hermana y el deseo de verla feliz es conmovedor.
Gwen, por otro lado, es la dama perfecta de la aristocracia; Es hermosa, elegante, serena y encantadora. Desde la trágica muerte de su esposo, se ha acomodado a la vida de mujer viuda, pese a sus escasos treinta y dos años, y se desvive por su familia y amigos. Me encantó su alegría y sentido del humor y el hecho de que nunca deja que su discapacidad física defina quién es. Admiré su fuerza durante los tiempos difíciles de su matrimonio y la forma en que cuidó y apoyó a su esposo hasta su fallecimiento.

El romance entre Hugo y Gwen se desarrolla lentamente. Si bien es cierto que la atracción es inmediata, el meollo de la historia es el cortejo. Cada uno de ellos tiene problemas internos que no les permiten soltarse por completo. Y Hugo, aunque ha sido elevado a Lord, es consciente de una división de clases entre él y Gwen. Pero se hablan y se conocen, y Mary Balogh deja tiempo para que crezca la confianza mutua. Ambos crecen y cambian a medida que se enamoran, pero es Hugo quien sufre los cambios más significativos pero sutiles.

Mary Balogh teje una historia inteligente y conmovedora de dos personas de diferentes clases sociales que encuentran el amor. Es un romance emocionalmente precioso e impulsado por los personajes, escrito desde el corazón, mostrando un romance entre personas de diferentes estructuras sociales que descubren que vivir en los mundos del otro no es tan malo como pensaban, y que juntos pueden tener una vida maravillosa. Hay buenos momentos de humor y me ha parecido una historia y una pluma preciosa. Sin duda seguiré leyendo la serie del Club de los Supervivientes. Estoy deseando conocer a los protagonistas de la siguiente historia de amor.

En resumen, 'La Proposición' es la primera parte de la serie El Club de los Supervivientes, una historia de amor en la época de la regencia que destaca por la preciosidad y delicadeza de su desarrollo, protagonizada por personajes de diferentes estructuras sociales que descubren que pueden tener todo lo que desean juntos. También trata sobre la curación, la redención personal y la búsqueda del equilibrio y el amor en la vida.

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