La historia fluye de una manera muy amena y entretenida, en esa línea de conexión entre la comunidad Sig en Inglaterra y el mundo occidental. Casi sin pretenderlo nos muestra una realidad a veces tierna, a veces lógica, a veces dura, pero siempre cierta, porque la vida es así. Las viudas indias son como fantasmas y la autora les da una presencia, una gracia, un saber, que no pasa desapercibido al lector, y las envuelve de poder narrativo, a pesar de la sencillez de las historias que cuentan. Opinión completa en el blog Enlace: https://millibrosenmibibliot.. |