El vuelo de Lena

El tiempo, la rutina y el querer seguir adelante sin anclarte más de lo necesario en la tristeza no hacen que duela menos, pero sí que puedas volver a ser feliz a pesar de ello.

¿Sabes, Lena? En ese momento entendí que en la vida hay que ser consecuente y no engañarse nunca: si no te gusta lo que ves, échalo de tu vida. Sea lo que se y sea quien sea

Cada día es una página en blanco que solo nosotros escribimos y no es necesario saber qué pasará para disfrutar de lo que ocurra hoy.

A veces las ilusiones se debilitan porque no tenemos la fuerza para pelearlas. Y entonces entramos en el bucle de la apatía. Tienes que salir de ahí, mi niña.

Ojalá hubiera sido lo suficientemente fuerte como para ser débil.

- A veces se nos olvida que tenemos más motivos por lo que estar agradecidos a la vida que cosas que nos faltan.
- Y cuando lo interiorizas, te das cuenta de que con nada puedes ser feliz.

Y es que, muchas veces, los comienzos que nos asustan no siempre desembocan en los malos finales que imaginamos.

Cuando mi voz calle con la muerte, mi corazón te seguirá hablando.

A veces las ilusiones se debilitan porque no tenemos la fuerza para pelearlas. Y entonces entramos en el bucle de la apatía.

Nada. Entre nosotros todavía hay silencios que no se llenan.