Juan Salvador Gaviota

Este libro lo leí por un trabajo de clases. No pensé que me gustaría tanto como me gustó. Los adolescentes no siempre queremos que los libros tengan un mensaje super implícito y destacado todo el tiempo en cada mísero párrafo del libro, la clave para que un joven lea, es que la novela sea: entretenida.

Así de fácil, no hay algo que te enganche más a un libro que el hecho de que te trasmita bien las emociones, no tiene que tener una narración complicada, con una sencilla y cuidada cualquier obra puede darle una buena bienvenida al mundo de la literatura a un jóven; eso, es lo que tuvo Juan Salvador Gaviota para mí, complió con ser entretenido, no como esos libros laaargos y llenos de figuras retóricas y términos rebuscados cada dos palabras que no permiten comprender nada rápidamente y solo estresan, y su mensaje (porque por supuesto tiene mensaje) llegó solo y detrás de todo, siendo tan sutil como lo era de notorio, siempre debajo de las letras y a lado del contexto.

En fin, me encantó, un libro corto y bonito, que siempre recordaré con nostalgia por haberme dado un bonito momento.