Vamos a contar mentiras

Me ha encantado el libro y he quedado gratamente satisfecho. El lenguaje que la autora emplea es el mismo que empleamos en una conversación de amigos: coloquial, familiar a veces, claro y directo. Sin ningún tipo de enredos o florituras.

Al principio pensé que en cada capítulo cada una de las chicas iba a contar una historia, haciéndose un libro algo denso, pero no fue así. Es en el primer capítulo cuando sí hay cuatro historias, básicamente para presentarnos también a los personajes. El resto es una.

Cada una de estas historias me han transmitido una serie de sentimientos distintos. La primera, "Armario", me ha parecido muy graciosa. En ella cada una debe contar cómo salieron del "armario" (una palabra que a mí no me gusta nada emplear). Cada una de ellas lo hizo de una forma totalmente distinta. La historia de Blanca cuando se lo contó a su madre me hizo reír mucho, especialmente con lo de la "homosexualidad del más allá", aunque la de Concha también es muy divertida.

Mientras que el primero es gracioso, el segundo es, desde mi punto de vista, pura ternura, amor y con un toque de drama. También aparece en una de las historias una persona del género no binario, identificado como "elle". Esto me ha ayudado muchísimo a entender a este colectivo muy discriminado socialmente y del que poco conocía. La historia de "La Bella y la Fea" es una historia con la eterna frase de "qué hubiera pasado si..." con la que tanto nos torturamos a veces, yo el primero.

También hay un relato al estilo de novela negra que me ha parecido muy bueno. Pero, sin dudas, la que más me ha gustado es la de la abuela Juana. Una historia de una mujer lesbiana en la clandestinidad en época de Franco llena de amor puro.

Ya hemos dicho que entre relato y relato van surgiendo problemas entre las cuatro, enfrentándose unas con otras por esto. Las chicas que entran en la cabaña no son las mismas que salen. Sus historias han cambiado. Ha habido una gran evolución.

Este libro también me hace pensar en lo duro que ha tenido que ser la vida de una persona homosexual décadas atrás. Ya lo fue cuando era niño y recibía buylling en el colegio e instituto, mucho más lo sería en épocas anteriores. al mismo tiempo te planteas, ¿por qué? Es un libro con historias con mensajes profundos y serios contados con toques humorísticos, románticos o negros.

Si tuviera que poner un pero o señalar algunas cosas que considero poco acertadas (por ser un poco quisquilloso) diría que en algunas historias muchas de las mujeres que han perdido por fallecimiento a sus esposas o novias encuentran un nuevo amor a los pocos meses. A mí me costaría muchísimo poder recuperarme de esa pérdida. Otra cosa mala, o buena según se mire, es que a veces la homosexualidad resulta como algo "a ratos". Hay historias en las que mujeres casadas con hombres se acuestan con mujeres y lesbianas que se acuestan con hombres. Hay relaciones homoeróticas y "heteróticas" (no se si existe una palabra para esto). Yo sería incapaz de tener relaciones sexuales con alguien que no fuera del sexo que me gusta.

En definitiva, es un libro que me ha encantado. Lo bueno es que está escrito con personajes femeninos de la comunidad LGTB+ pero que perfectamente puede ser leído, y se debe leer, por todo el mundo, sea de la condición, sexo o preferencia sexual que sea. Es un libro con una narración increíble en el que la autora trata temas complejos y serios con distintos toques según qué historia. Además da una mayor visualización a las mujeres LGTB+, incluso del género no binario, y de lo difícil que resulta a veces vivir en una sociedad acomplejada y cerrada. Un libro maravilloso que me ha emocionado, alegrado y, a veces, identificado. Super recomendable.

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