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La historia nos sitúa en Estados Unidos, Washington. En esta ciudad será donde Violet, nuestra protagonista, conozca por primera vez a Jennings, en el bar de un hotel. Violet tiene una hermana gemela totalmente opuesta a ella, Daisy. Daisy es divertida, alocada, no se anda con rodeos con los chicos y no tiene tapujos en lanzarse y tener rollos de una noche. Sin embargo, Violet es todo lo contrario, pero ahora, tras salir de una relación, perder su trabajo y tener que vivir con su hermana, decide cambiar de actitud. Por ello decide andar sin rodeos y por primera vez en su vida tener un rollo de una noche. Lo que ambos no saben es que ninguno de los dos es quién afirma ser. Un juego de mentiras peligroso que se acaba convirtiendo en mucho más. Un viaje por la historia de Estados Unidos, una guía turística, sexo, y risas aseguradas. ¿Quién se enterará primero de las mentiras del otro? ¿Conseguirá Violet hacerse pasar por su hermana gemela? Comencé este libro con una ilusión tremenda, y lo finalicé con la misma ilusión. Es de esas historias de las que sabes que vas a salir con buen sabor de boca, y, finalmente, así fue. En rasgos generales, no vamos a encontrar una trama compleja ni totalmente novedosa, pero esto no ha supuesto algo negativo para mí. Necesitaba leer algo fresco, que me distrajese y que no tuviese excesivos personajes, y di en el clavo. Nuestra protagonista, Violet, es una chica de 26 años que acaba de salir de una relación, ha tenido que irse a vivir con su hermana tras perder su trabajo. Ha sido un personaje que me ha sacado risas continuas con sus ideas y ocurrencias, es una chica espontánea a la vez que timida y muy divertida. Violet no sabe el potencial que tiene frente a los hombres, nunca ha tenido un rollo de una noche y no sabe realmente lo sexy que puede llegar a ser. Me ha sorprendido muchísimo este personaje porque aporta la frescura necesaria a la novela. Jennings es un empresario británico que le saca algunos años más a nuestra protagonista. Un hombre con un gran puesto de trabajo y muy maduro. A lo largo de la historia veremos como Jennings se queda cada vez más sorprendido con ciertas actitudes de Violet que demuestra su verdadera inexperiencia en rollos. Me ha encantado ver el punto de vista de Jennings a la vez que el de Violet, me lo he pasado genial leyendo sus suposiciones, ya que nuestro protagonista no es tonto y sabía que algo ocultaba la chica. Vamos a encontrar personajes secundarios, pero como he dicho antes van a ser escasos. Me ha gustado que los secundarios tengan apariciones breves y la historia se centre en los protagonistas, pero por otro lado, aportan un toque distinto y dinamizan la historia. La pluma de la autora es ágil, fresca y muy fluida. No se me ha hecho la lectura pesada en ningún momento, va al grano y cuenta una historia corta pero intensa. Me ha sorprendido a la vez que me ha gustado reírme en escenas de sexo sin tapujos pero con escenas un tanto surrealistas. El juego que ha tenido la autora en esta parte de la narración me ha dejado maravillada. Debo decir que el toque de humor me ha desconcertado alguna que otra vez en las escenas eróticas, pero a grandes rasgos me han divertido bastante. La historia se encuentra narrada en primera persona por nuestros protagonistas Violet y Jennings, alternando un capítulo contado por uno y por otro. Vamos a conocer cómo piensan de primera mano y las ocurrencias que tienen cada uno a medida que va avanzando la historia. El tipo de narración me ha gustado y creo que es el adecuado para la historia. La autora ha usado un lenguaje sencillo y coloquial, sin pelos en la lengua, claro y directo. La novela cuenta con 240 páginas divididas en 37 capítulos y un epílogo. Este libro es autoconclusivo por lo que la historia queda completamente resuelta. Quizás el epílogo lo he visto un poco precipitado, ya que durante la novela transcurre poco tiempo y luego da un salto temporal. Pero me ha gustado saber qué pasa en el futuro. La novela tiene una duración perfecta para disfrutarla y leer en una tarde de domingo como fue mi caso. En conclusión, Sin rodeos, es una novela romántica, con grandes dosis de erotismo y a la vez toques de humor que te hará pasar un rato de lectura sublime. Con un lenguaje sencillo y coloquial Jana Aston te adentra en una novela fresca y ligera con unos protagonistas muy diferentes entre sí y muy peculiares. Si queréis un libro ligero y que se lea en nada, esta es vuestra novela. |
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