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Aunque al principio la trama puede resultar algo confusa y lenta por la combinación de cuentos de hadas con la historia principal, El oso y el ruiseñor es un libro de fantasía diferente, con una ambientación espectacular y una buena dosis de mitología eslava. A nivel argumental, es cierto que la novela tiene un ritmo muy lento, y tanto los nombres como la terminología rusa pueden resultar algo liosos. Sin embargo, es un libro que merece la pena leer porque es sorprendente, te envuelve de lleno en ese clima frío e invernal, a la par que te permite conocer muchas leyendas, espíritus y demonios procedentes de la mitología rusa, algo que no suele ser muy común en los libros que leemos habitualmente. No obstante, a medida que avanzamos, la trama se torna muy enigmática e intrigante, ya que la autora nos va revelando información a cuentagotas sobre la amenaza y oscuridad que acecha a nuestros protagonistas. Además, también me ha resultado muy interesante que se ahonde en el folklore ruso, el sistema político de la época, las arraigadas influencias religiosas y la inferioridad de la mujer en el medievo. Con una ambientación bucólica, esta novela nos describe a la perfección el clima gélido que rodea la historia, lo cual me ha encantado porque consigue transmitir esa sensación de frío en el cuerpo y ofrecernos una imagen muy visual del invierno y la zona rural. También hace especial hincapié en describir las comidas, indumentaria, adornos y pequeños detalles característicos del país. Teniendo en cuenta que esta historia transcurre en la época medieval, el feudalismo también está muy presente con su sistema de señores y vasallos, y mostrándonos cómo viven en el campo a través de la preocupación por la cosecha, la caza, cuidar del ganado y los caballos. Enlace: https://laestanteriadecho.bl.. |
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