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Komori es una joven bruja de 13 años que emprende un viaje para convertirse en sabia como su abuela hacia la tierra de Alidra. Pero llega a Siloria por error, aunque decide quedarse. Allí conoce a 3 extraños muchachos (un joven que tiene una calabaza por cabeza, un chico-zorro y un chico desarticulable) con los que entablará una amistad y vivirá un montón de aventuras. También descubrirá que ella es la maga elegida para devolver la magia a esa tierra y tendrá que impedir que los Señores de la Noche (vampiros) provoquen una nueva guerra en la tierra de Zoa. Este libro es el primero de una trilogía y sinceramente creo que no voy a continuar leyéndola. No me ha gustado nada salvo los dibujos que vienen en la parte final del libro ya que el autor es también ilustrador. Los personajes me han parecido todos super-extraños ya que en la historia aparecen un sinfín de personajes muy variopintos (vampiros, quimeras, erizos parlantes y todo tipo de monstruos que os podáis imaginar) y su manera de comportarse es cuanto menos peculiar. Tampoco me gusta que el argumento principal casi ni se aborde ya que se menciona un poco al principio y luego otra vez el final, en el resto de páginas se dedica a hablar de juegos extraños como el muubol, de los habitantes del pueblo, etc. Vale que es un libro destinado más para un público infantil/juvenil pero si a mí me ha costado seguir la historia no me quiero imaginar a un niño o adolescente. A mí me suelen gustar los libros de fantasía y en los que parece la magia pero este en mi opinión se pasa de fantasioso. |
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